Cuando arrancó el año, había una disyuntiva entre lo que iba a hacer Cambiemos respecto a seguir o no el programa del Fondo Monetario Internacional (FMI) letra por letra en el marco de un año electoral. Se anticipaba que el costo social iba a ser grande, pero el presidente, Mauricio Macri, ya tomó una decisión.
En su última conferencia de prensa, el presidente del Banco Central (BCRA), Guido Sandleris, aseguró que el esquema de base monetaria cero se mantendrá definitivamente hasta fin de año. Además, aclaró que “la tasa de interés real en Argentina es un atributo, no como el resto del mundo”.
¿A qué apunta el equipo económico? La autoridad monetaria pactó con el Fondo usar todas las reservas para controlar el tipo de cambio durante las elecciones. Además de esta medida, la fijación de la tasa por encima del 70% refuerza el esquema de atracción de inversores para pesificar sus activos.
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En diálogo con El Destape, el economista Gustavo Marangoni afirmó que el impacto de la aplicación del programa consensuado con el Fondo “es demoledor”. Y apuntó: “El Gobierno asumió que es así. No va haber recuperación en estos términos”.
“El FMI juega con el Gobierno porque fue usado como su tarjeta de crédito y hoy Argentina es su principalmente cliente”, enfatizó el economista. Sobre el cumplimiento del programa hasta fin de año, Marangoni remarcó que el organismo será “indulgente” porque la gestión de Macri “es el plan A”.
De hecho, en los últimos 20 días hábiles, el Central ya perdió reservas por el equivalente al 90% (U$S 9.665 millones) del último desembolso del FMI, que fue de U$S 10.870 millones. En ese mismo período, la tasa se mantuvo en el 70% y los resultados están a la vista.
La recesión no parece encontrar piso por el momento y las proyecciones no auguran una recuperación sustancial. La retracción de la actividad económica acumula 10 meses consecutivos, según el INDEC.
Por otra parte, la última semana marcó una cierta tranquilidad en lo que respecta la cotización del dólar. Tras haber sufrido meses inestables en marzo y abril, la última cotización finalizó en $ 46,20, lo cual no representó grandes cambios en comparación a días anteriores.
Respecto a esto último, el director de la carrera de Economía de la Universidad Nacional de Moreno, Alejandro Robba, sostuvo que Cambiemos “tiene un solo objetivo: sostener el dólar a costo de la pérdida de empleo, la actividad y los ingresos”. A lo que añadió: “No importa si se dispara la deuda o la fuga de capitales”.
“Que la sangría de dólares del Banco Central se detenga depende de la cosecha del sector agropecuario y que pare la dolarización de cartera”, apuntó Robba. Es que en los últimos 23 meses, el pasaje de activos a moneda estadounidense ya trepó a casi U$S 37.000 millones.
A tres meses de las PASO, Macri parece ya haber decidido entre apuntalar el mercado interno y descomprimir la crisis o profundizar el ajuste y alentar la timba financiera a costa de los recursos del Estado. Ahora resta saber si el costo político será letal para sus aspiraciones presidenciales, ya que las consecuencias en el plano de la economía real están a la vista.