La policía de Pakistán disparó gases lacrimógenos para dispersar hoy a manifestantes partidarios del ex primer ministro encarcelado Imran Khan, cuyo partido los instó a protestar frente a oficinas electorales contra presuntos fraudes durante las elecciones legislativas celebradas el jueves pasado, en las que fueron los más votados.
"Algunos individuos incitan a manifestaciones ilegales alrededor de la Comisión Electoral y de otras oficinas gubernamentales", declaró la policía de la capital Islamabad, según la agencia de noticias AFP.
Horas antes de los enfrentamientos, la policía había advertido que tomaría medidas estrictas contra las protestas, en virtud de una ley de la época colonial que prohíbe las concentraciones de cinco o más personas.
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"Se iniciarán acciones legales contra las manifestaciones ilegales; hay que recordar que llamar a concentraciones es igualmente un delito", agregó la policía.
Los enfrentamientos se sucedieron en la ciudad de Rawalpindi, al sur de la capital, y en Lahore, en el este, mientras las protestas en otras ciudades se desarrollaron sin incidentes.
En Rawalpindi, la policía lanzó gases lacrimógenos contra docenas de manifestantes, después de que estos se negaran a dispersarse, mientras en Lahore, decenas de agentes antidisturbios, equipados con escudos y porras, desalojaron a unos 200 manifestantes.
Varias personas fueron detenidas en Karachi, en el sur, según medios locales, aunque hasta esta noche no se habían reportado heridos.
Los candidatos independientes, en su mayoría apoyados por el partido de Khan, el Pakistán Tehreek-e-Insaf (PTI), se alzaron con el mayor número de escaños durante los comicios celebrados el jueves, reduciendo las oportunidades de la Liga Musulmana de Pakistán (PML-N) del ex primer ministro Nawaz Sharif, regresado del exilio en octubre y apoyado por el ejército.
El partido de Imran Khan no pudo participar como bloque en los comicios, por lo que sus candidatos se presentaron como independientes.
No obstante, estos no pueden formar un gobierno, por lo que los partidos rivales deberán negociar posibles alianzas.
Khan fue ganador de los comicios de 2018.
Sin embargo, el popular exjugador de críquet de 71 años fue despojado del cargo por una moción de censura en 2022 y recibió tres largas condenas de cárcel días antes de los comicios.
Los dirigentes del PTI afirman que si no hubiera habido algún arreglo durante los comicios, como aseguran, habrían ganado todavía más diputados.
El corte de los servicios de telefonía y de internet móvil ordenado por las autoridades el jueves pasado y la lentitud en el proceso de recuento de votos levantaron sospechas de intentos de manipulación durante el proceso electoral.
La campaña estuvo poco animada, prueba del desencanto con la política entre los paquistaníes, que en un 70% "no confían en la transparencia de las elecciones".
"Las elecciones fueron amañadas de manera sutil en todo Pakistán", declaró el sábado el presidente del PTI, Gohar Ali Khan, quien había pedido a sus partidarios "manifestarse pacíficamente" hoy.
Con información de Télam
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