Al menos 17 ciudadanos británicos, incluidos niños, murieron o están desaparecidos tras el ataque de Hamas a Israel ocurrido el pasado sábado, estimó una fuente oficial.
El portavoz informó a la BBC que la nueva estimación precisa datos de la anterior, que hablaba de "más de una decena" de víctimas británicas por el conflicto, que ya se cobró la vida de 1.200 personas en Israel, y de 1.000 atribuidas a ataques aéreos israelíes sobre Gaza.
Entre las víctimas confirmadas se encuentran Nathanel Young, un joven de 20 años que estudió en la escuela integral mixta judía JFS en el norte de Londres, y Bernard Cowan, originario de Glasgow, quien emigró a Israel con su familia.
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"Estamos devastados y desconsolados", expresó David Moody, director de la escuela JFS, al referirse a la muerte de Young.
"Nathanel es recordado con cariño y pensamos en él sólo con amor", añadió.
El funeral de Young en el cementerio nacional de Israel fue abruptamente interrumpido por explosiones sobre Jerusalén, causando pánico entre los asistentes.
Cowan también fue recordado por su familia, que lamentó su pérdida en un comunicado.
"Pedimos privacidad en este momento mientras procesamos esta enorme pérdida", dijo la familia.
La situación también afectó a otros británicos en la región, como Jake Marlowe, reportado como desaparecido tras un ataque en el festival de música Supernova, y Daniel Darlington, quien se cree fue asesinado junto a un amigo en el kibutz Nir Oz. Moody agregó, refiriéndose a Marlowe, que "hemos visto informes de su desaparición y todos rezamos para que lo encuentren pronto".
El ministro de Defensa del Reino Unido, Grant Shapps, declaró por su parte que el país está ofreciendo "apoyo moral y práctico" a Israel, manteniendo comunicación constante con el Gobierno de Tel Aviv.
El conflicto sigue repercutiendo también en el Reino Unido después de los ataques con manifestaciones propalestinas y varios incidentes en barrios donde predomina la colectividad judía.
Durante una manifestación propalestina en la ciudad de Sheffield, norte de Inglaterra, manifestantes retiraron una bandera israelí del ayuntamiento, sustituyéndola por una palestina, consignó el diario The Guardian,
Tom Hunt, líder del consejo, enfatizó que "el terrorismo nunca está justificado" y llamó a la paz y respeto.
En respuesta a la creciente desinformación en redes sociales, la ministra de Tecnología del Reino Unido, Michelle Donelan, convocó a ejecutivos de plataformas sociales para discutir la eliminación de contenidos violentos relacionados con el conflicto.
En especial, se cuestionó la cobertura en la plataforma X de Elon Musk, anteriormente conocida como Twitter, por la difusión de noticias falsas y desinformación.
Donelan expresó en X su intención de tomar medidas para eliminar contenido violento, solidarizándose con Israel y la comunidad judía.
Con información de Télam
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