El Gobierno ruso consideró "muy positivo" que los expertos del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) que llegaron ayer a Zaporiyia hayan podido visitar la central nuclear ucraniana, pese a todas las dificultades, y señaló que aún es "demasiado pronto" para evaluar sus conclusiones.
"Globalmente, consideramos muy positivo que la delegación haya llegado y comenzado a trabajar pese a las dificultades, incluidas los problemas relacionados con las acciones provocativas de Ucrania, dijo a la prensa el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, aludiendo a los ataques a la planta de los que Moscú culpa a Kiev.
El portavoz agregó que el equipo del OIEA sigue trabajando en la planta donde debe "evaluar la condición de la central y los aspectos relacionados con la seguridad nuclear".
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Una delegación del OIEA, liderada por el el argentino Rafael Grossi, director del organismo, llegó el 1 de septiembre a la planta nuclear y recorrió las áreas clave que tenía planeado inspeccionar, donde les mostraron las secciones dañadas durante los bombardeos que Rusia adjudica a las tropas ucranianas.
Ayer, Grossi afirmó que "la integridad física" de la central ucraniana fue "violada", tras la primera inspección de esa planta, ocupada por tropas rusas desde marzo y blanco de ataques.
Los dos bandos se acusan mutuamente de los bombardeos de las últimas semanas en la zona, que despertaron temores de un desastre nuclear.
La inspección de ayer fue llevada a cabo por la misión del OIEA de 14 miembros que llegaron al lugar tras un riesgoso cruce de la línea de frente y poco después de nuevos bombardeos en el área.
Grossi indicó que varios miembros de la misión permanecerán "hasta el domingo o el lunes para proseguir la evaluación"
"Tenemos mucho trabajo para analizar ciertos aspectos técnicos", señaló, aunque sin precisar el número de los inspectores que se quedaron en el lugar.
Los inspectores entraron en el área desde las zonas controladas por Ucrania, una condición impuesta por Kiev, que buscaba evitar que la visita legitimara la ocupación rusa.
El Ministerio ruso de Defensa aseguró que decenas de "saboteadores" del ejército ucraniano habían cruzado en embarcaciones el río Dniéper, que separa sus posiciones, a tres kilómetros al noreste de la central, e indicó que había tomado "medidas para destruir al enemigo".
En el frente, en tanto, el Estado mayor del ejército ucraniano dio parte por la noche de "bombardeos masivos" rusos en los alrededores de la ciudad nororiental de Jarkov, la segunda del país, la misma Zaporiyia y en las orientales Kramatorsk, Bajmut y Sloviansk.
La central nuclear de Zaporiyia, la mayor de Europa, se encuentra en el sureste de Ucrania, cerca de la ciudad de Energodar, y desde el pasado mes de marzo, permanece bajo el control de los militares rusos.
Durante las últimas semanas, Rusia y Ucrania se acusaron mutuamente de bombardear las instalaciones de la planta.
Moscú alega que su presencia militar en la central persigue evitar fugas de materiales nucleares y radiactivos.
Con información de Télam