El Gobierno alemán aprobó una reforma para facilitar la obtención de ciudadanía para inmigrantes

23 de agosto, 2023 | 12.39

El Gobierno alemán aprobó hoy una reforma legal que facilita la obtención de la ciudadanía alemana para los inmigrantes que estén bien integrados en el país y que, al mismo tiempo, busca aumentar la llegada de trabajadores cualificados extranjeros.

La ley no solo rebaja los requisitos para convertirse en ciudadano alemán, sino que también permite la nacionalidad múltiple.

Sin embargo, la naturalización seguirá estando sujeta a requisitos económicos y de integración democrática.

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"Queremos que personas que forman parte de nuestra sociedad desde hace mucho tiempo puedan contribuir a dar forma a nuestro país democráticamente", declaró la ministra del Interior alemana, la socialdemócrata Nancy Faeser.

Al mismo tiempo, la reforma refuerza la competitividad: "Solo atraeremos a los mejores cerebros del mundo si, en un futuro próximo, pueden integrarse plenamente en nuestra sociedad, con todos los derechos democráticos", agregó Faeser.

Actualmente, según cifras del Ministerio del Interior, alrededor del 14% de los habitantes de Alemania no tienen pasaporte alemán, algo más de 12 millones. Esto incluye a unos 5,3 millones que viven en Alemania desde hace al menos 10 años.

Faeser ve en ello un problema de participación: "Si una parte de la población que tiene su hogar y está arraigada aquí no puede participar en los procesos de toma de decisiones políticas, entonces eso no es nada bueno para nuestra democracia", señaló, según informó la agencia de noticias Europa Press.

Con esta reforma, los inmigrantes podrán adquirir la ciudadanía tras cinco años de residencia en Alemania, y no tras ocho años, como hasta ahora.

Si obtienen buenos resultados en la escuela o el trabajo, dominan bien el idioma o realizaron trabajos de voluntariado, la naturalización debería ser posible tras solo tres años.

Quien quiera nacionalizarse debe comprometerse con los valores de una sociedad libre, es decir que quedan expresamente excluidas las personas que hayan cometido delitos por motivos antisemitas o racistas.

Un requisito previo es también poder ganarse la vida sin recibir prestaciones sociales.

Asimismo, en el futuro, quien quiera un pasaporte alemán no tendrá necesariamente que renunciar al antiguo. Se permitirá la llamada nacionalidad múltiple si se demuestra la integración y los conocimientos de alemán.

Todos los niños nacidos en Alemania de padres extranjeros podrán recibir un pasaporte alemán si al menos uno de los progenitores ha vivido legalmente en Alemania más de cinco años. Hasta ahora se aplicaba un límite de ocho años. Además, los hijos podrán conservar la nacionalidad de sus padres.

También se van a simplificar las normas para las personas que vinieron a Alemania como trabajadores hasta la década de 1970 o como trabajadores contratados en la República Democrática de Alemania hasta 1990, que en el pasado habían recibido pocas ofertas de integración, argumentó Faeser.

El Gobierno alemán del canciller federal Olas Scholz quiere prescindir de los exámenes escritos de alemán y de la prueba de naturalización. Solo tienen que demostrar que pueden comunicarse en alemán en la vida cotidiana sin problemas significativos.

El año pasado, unas 168.500 personas solicitaron la nacionalidad alemana, y solo el 3,1% de los extranjeros que lleva viviendo aquí al menos 10 años, según el Ministerio del Interior.

La oposición conservadora, la alianza de los partidos CDU y CSU, consideró la reforma un gran error.

"La ley envía señales equivocadas en un momento en que los problemas de integración en nuestro país son cada vez mayores y la inmigración ilegal se nos está yendo completamente de las manos", sostuvo el diputado de la CDU Alexander Throm.

El jefe del grupo parlamentario de la CSU, Alexander Dobrindt, se sumó a las críticas.

"Rebajar los requisitos para obtener un pasaporte alemán en tiempos de cifras máximas de inmigración provoca una mayor polarización en la sociedad", dijo.

Tras la decisión del gabinete de Scholz, el proyecto de ley se remitirá al Bundestag, la Cámara Baja del Parlamento, sin cuya anuencia no podrá entrar en vigor.

Faeser dijo que, en el mejor de los casos, la reforma podría entrar en vigor en enero de 2024.

Con información de Télam