(Por Alberto Galeano).- Las negociaciones por el programa nuclear de Irán con seis potencias mundiales presentan señales claras de que Estados Unidos puede eliminar las sanciones económicas que pesan contra Teherán, pero la Unión Europea (UE) advierte que se acaba el tiempo para reactivar el pacto de 2015.
En un tuit enviado el martes, el principal negociador iraní, Ali Bagheri Kani, escribió que algunas de las contrapartes "persisten aún en el juego de la culpa, en lugar de aplicar una real diplomacia".
Kani opinó, además, que la diplomacia es "una calle de doble sentido", sugiriendo que los tres socios europeos, Reino Unido, Francia y Alemania, "carecen de voluntad política para alcanzar un acuerdo con el Gobierno persa", llamado Plan de Acción Integral Conjunto (PAIC), informó la cadena qatarí Al Jazeera.
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Sin embargo, Londres, París y Berlín indicaron en un comunicado que "en las últimas 24 horas se han hecho algunos avances técnicos", pero advirtieron que "queda muy poco espacio para estas negociaciones", reanudadas el 29 de noviembre en Viena, Austria.
En las conversaciones también participan los representantes de China y Rusia, junto con Estados Unidos que asiste en forma indirecta, tras retirarse del pacto en mayo de 2018 durante el Gobierno de Donald Trump; todos forman parte del llamado Grupo 5+1.
Pese a las dudas que existen para llegar a un acuerdo final, esta semana ocurrieron dos declaraciones auspiciosas, tanto del Gobierno del presidente iraní, Ebrahim Raisi, como de la Casa Blanca.
La primera fue formulada el martes por la enviada norteamericana a la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Linda Thomas-Greenfield, quien afirmó durante una reunión del Consejo de Seguridad que Estados Unidos "estaba completamente preparado para levantar las sanciones inconsistentes con nuestros compromisos del PAIC".
Esta actitud estadounidense, dijo Thomas-Greenfield, permitiría a Irán recibir los beneficios económicos del acuerdo.
La diplomática no dudó en resaltar que si Irán se acerca a las conversaciones en Viena, "con urgencia y crítica, los países pueden alcanzar e implementar rápidamente un entendimiento sobre el retorno mutuo".
La segunda noticia la dio el jefe negociador iraní Kani, quien resaltó que se han logrado "buenos progresos" durante los contactos de esta semana, tras lo cual afirmó que las reuniones se retomarán tras un receso de unos días.
Aun así, Kani explicó que el Gobierno persa no pidió detener las negociaciones del viernes, ya que la pausa se había acordado desde el principio de las conversaciones "después de alcanzar el borrador de un acuerdo", informó la agencia iraní de noticias ISNA.
Sin embargo, el Reino Unido, Francia y Alemania insistieron en que la interrupción fue solicitada por Teherán y advirtieron que el tiempo se acaba para reactivar el pacto.
Para Gustavo Cardozo, profesor en Relaciones Internacionales de la Universidad Regional del Noroeste del Estado brasileño de Rio Grande do Sul (Unijui), "es una realidad que existe una posibilidad más clara de llegar a un nuevo acuerdo nuclear con Irán bajo el PAIC".
"El régimen iraní se ha mostrado más flexible a ceder a ciertos pedidos concretos planteados por la UE, lo cual abrió un camino de dialogo con la Administración de Joe Biden", afirmó.
El analista dijo que "para Washington es importante avanzar en este sentido con Teherán, dado que posibilitaría, no solo monitorear el desarrollo nuclear iraní, sino descomprimir la presión israelí sobre esta problemática".
Israel rechaza el pacto nuclear con Irán y, varias veces, se ha pronunciado por adoptar una vía militar contra el país persa.
"Además, sería un triunfo diplomático en una región muy disputada con Moscú y Beijing", opinó Cardozo.
Paralelamente, el enviado especial de la UE, Enrique Mora, dijo que aguarda que las conversaciones se retomen durante 2021. "No nos quedan meses; nos quedan semanas para llegar a un pacto", advirtió Mora.
En este contexto, Irán llegó a acuerdo con el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) para reemplazar las cámaras de seguridad en las instalaciones nucleares de la central Karaj, al oeste de Teherán, destruidas en junio por un acto de sabotaje del que Teherán culpó a Israel.
Tras el retiro de EEUU del acuerdo en mayo de 2018, Irán canceló sus compromisos sobre varios puntos del pacto de Viena del 15 de julio de 2015.
Un año después, Irán recibió una serie de sanciones económicas por parte de Washington.
En represalia, el Gobierno persa empezó gradualmente a enriquecer uranio hasta un porcentaje del 60%, a la vez que empleaba centrifugadoras avanzadas, según constató la OIEA.
Sin embargo, se necesita alcanzar el 90% de uranio puro para construir un artefacto nuclear, posibilidad que Teherán ha rechazado en distintas oportunidades, señalando que solo busca el uso pacífico de la energía atómica.
Con información de Télam