Economista en Suecia acusa a la culpable de la inflación: Beyoncé

Un economista del Danske Bank afirma que la cantante estadounidense estuvo directamente relacionada a la suba de precios que padeció el país en mayo.

16 de junio, 2023 | 14.18

Los altos niveles de inflación alcanzados por Suecia el mes pasado están relacionados con los conciertos que la cantante estadounidense Beyoncé dio ese mes en la capital, Estocolmo, sostiene el economista sueco Michael Grahn, debido principalmente al aumento que estos generaron en los precios de los hoteles.

La inflación, medida en índice de precios al consumo (IPC), fue del 9,7 % en mayo, comparada con el mismo mes del año anterior, lo que supone un descenso respecto al 10,5 % de abril, según los datos difundidos por la Oficina Central de Estadística (SCB), pero por encima de las expectativas de los analistas.

La caída de los precios de la electricidad y los alimentos contribuyó a bajar la inflación, pero la subida de los de los servicios, la cultura, hoteles y restaurantes, entre otros, atenuó la bajada general.

Según Michael Grahn, el economista jefe en Suecia del Danske Bank, principal banco danés pero con presencia también en Suecia, ese efecto tiene que ver con los dos conciertos que en mayo dio Beyoncé en Estocolmo y que supusieron el inicio de su gira mundial “Renaissance World Tour”, la primera en solitario de la artista en siete años.

Beyoncé, ¿culpable de la inflación en Suecia?

“El comienzo de la gira mundial de Beyoncé en Suecia parece haber influido en la inflación de mayo, cuánto es incierto, pero probablemente 0,2 o 0,3 puntos porcentuales de lo aportado por los hoteles. Quizás subió también los precios de los conciertos”, escribió Grahn en su cuenta en Twitter, en un comentario que se ha hecho viral.

 

“Esperamos que esta subida sorpresa se revierta en junio, una vez que los precios de los hoteles y las entradas regresen a su nivel normal”, agregó el economista.

Según explica el economista en un vídeo en la web del Danske Bank, los conciertos, que reunieron a unas 90.000 personas en total, parte de ellas llegadas del extranjero, provocaron que se agotaran las plazas hoteleras en el área de Estocolmo y un aumento “real” de los precios.

Con información de EFE