El primer ministro ucraniano, Denis Shmigal, garantizó este martes que su país cuenta con suficientes reservas de gas y carbón para afrontar un invierno particularmente complicado tras los recientes ataques rusos a la infraestructura energética nacional, que ya provocaron importantes cortes de luz y agua en varias ciudades, entre ellas la capital, Kiev.
Shmigal tranquilizó a la población al afirmar que hasta la fecha Ucrania acumuló unos 14.600 millones de metros cúbicos de gas, en su mayoría de procedencia nacional, a la vez que cifró en 1,5 millones las toneladas de carbón almacenadas. Respecto de las reservas de carbón, ponderó que esa tonelada y media es casi el doble de las que se considerarían óptimas para afrontar el invierno boreal.
"Se han acumulado suficientes recursos. La inyección de gas en nuestros almacenamientos también continúa. Un otoño relativamente suave y el ahorro de recursos energéticos nos permiten bombear más gas del que retiramos de los almacenamientos de gas", explicó. En base a estas reservas, Shmigal se mostró optimista de que Ucrania podría pasar el invierno sin mayores trastornos, aunque observó que ahora "el desafío clave" está relacionado con el daño que Rusia causa a la infraestructura energética ucraniana.
Sobre el suministro eléctrico, reconoció que la situación más problemática se registra en la ciudad y región de la capital Kiev, así como en Jarkov, donde las tropas rusas incrementaron su ofensiva contra la infraestructura crítica. En tal sentido, el jefe de Gobierno indicó que las autoridades están ahora inmersas en la adquisición de equipos de reserva y puesta a punto de sistemas de calefacción adicionales.
Ucrania está negociando estas compras con socios internacionales, consignó la agencia de noticias Europa Press. Shmigal lanzó un mensaje de agradecimiento a los ciudadanos que ajustaron su consumo energético, gesto que valoró al sostener que ayuda a "equilibrar el sistema" y reduce las posibilidades de apagones.
Una semana atrás, el presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, dijo que confiaba en que los ataques rusos a infraestructuras energéticas tendrían una "respuesta global" para contrarrestarlos.
Con información de Télam