El gigante ruso de la energía, Gazprom, abandonará sus negocios en Alemania. El anuncio lo realizó en un contexto de una disputa entre los dos países por la insistencia de Moscú en cambiar los pagos del gas a rublos en lugar de a euros.
Alemania depende en un 40% de la oferta de gas ruso. Hasta el momento, no estaba claro en Berlín cómo afectaría esta medida.
La empresa reveló que le había puesto fin a su participación en Gazprom Germania GMBH y en todos sus activos, incluida Gazprom Marketing & Trading Ltd. No dio más detalles ni explicaciones.
El diario económico Handelsblatt había informado el jueves que el gobierno alemán estaba considerando la posibilidad de expropiar las unidades de Gazprom y Rosneft en el país. Esto como una nueva ofensiva contra Rusia, luego de que invada Ucrania por pretender instalar bases militares de la OTAN. Todo se da en un contexto de preocupación por la seguridad de la oferta energética. El Kremlin respondió que cualquier medida de ese tipo sería una violación del derecho internacional.
Gazprom Germania tiene su sede en Berlín y tiene filiales en Suiza y la República Checa. Sus principales áreas de negocio son el almacenamiento, el comercio y el oferta de gas como combustible para el transporte por carretera y la navegación, con una red de estaciones de servicio en Alemania y la República Checa.
El presidente Vladimir Putin firmó el jueves un decreto para imponer el precio del rublo para el gas a los compradores de lo que Moscú considera países hostiles. Alemania rechaza el cambio, y su ministro de Economía vociferó que se trataba de un chantaje del líder ruso.