La entrega de aviones de combate F-16 por parte de las potencias occidentales a Ucrania no hará más que "prolongar el conflicto" en ese país, afirmó el presidente ruso, Vladimir Putin. En su intervención en la sesión plenaria del Foro Económico Oriental, en Vladivostok, Putin estimó que desde la contraofensiva ucraniana de junio, Kiev perdió unos 71.000 soldados. En las últimas semanas, Estados Unidos, también anunció la entrega de armas con uranio enriquecido y despertó la preocupación hasta de la propia Organización de las Naciones Unidas (ONU).
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) expresó una constante preocupación por el uso de uranio empobrecido en cualquier parte del mundo: "Nuestras preocupaciones sobre el uso de uranio empobrecido en cualquier parte del mundo han sido consistentes y se mantienen", afirmó el vocero del organismo, Farhan Faq.
El Foro Económico Oriental en donde habló Putin, se celebra anualmente desde 2015 en la ciudad de Vladivostok, en la costa sureste de Rusia, se desarrolla este año desde el 10 al 13 de septiembre en el campus de la Universidad Federal del Extremo Oriente, situado en la isla Russki. Allí, se expresó sobre la entrega de aviones por parte de Occidente, Putin se preguntó si esa situación cambiaría algo y se respondió: "No lo creo. No hará más que prolongar el conflicto", declaró. El presidente ruso dijo además "estar seguro" de que el suministro de bombas de racimo que Estados Unidos entregó también aportarán a que el conflicto se extienda en el tiempo. En esa línea, el mandatario opinó que para él "ya no hay límites", según recogió la agencia de noticias Sputnik.
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"Hace no tanto tiempo, la gestión estadounidense consideraba que la utilización de bombas de racimo era un crimen de guerra. Lo dijo de manera pública", explicó. El uso de este tipo de armamento es cuestionado por organizaciones de derechos humanos ante el gran daño que pueden generar entre la población civil, por lo que fue prohibido en un tratado internacional en la Convención sobre Municiones en Racimo en 2010. No obstante, Estados Unidos, Ucrania y Rusia no forman parte del tratado internacional para vetar este tipo de municiones, aunque sí lo suscribieron aliados de Washington y Kiev como Reino Unido, Alemania y Francia.
La contraofensiva ucraniana
Durante su discurso, el mandatario ruso estimó en 71.000 soldados las pérdidas de Ucrania desde el inicio de su contraofensiva a principios de junio: "Ucrania está llevando a cabo la llamada contraofensiva. Y no hay resultados, no vamos a hablar ahora si es un fracaso o no (...) Hay pérdidas, muchas. Desde el comienzo de la contraofensiva, las pérdidas de personal han ascendido a unas 71.000 personas", expresó Putin.
El presidente ruso agregó que, además, el Ejército ucraniano tiene 543 tanques, unos 18.000 vehículos blindados destruidos y especificó que allí se lleva a cabo "una movilización forzosa" de combatientes. En este contexto, Putin volvió a apuntar contra Estados Unidos por incentivar a los ucranianos a continuar las acciones bélicas, porque "necesitan mostrar algún resultado" de su contribución a la crisis antes del inicio del proceso electoral para las presidenciales estadounidenses, programadas para noviembre de 2024. Además, condenó los esfuerzos del Reino Unido para entrenar a los saboteadores ucranianos para que ataquen las instalaciones nucleares sin darse cuenta de las consecuencias de estas acciones.
Con información de Télam