Estados Unidos registró un repunte de los contagios de coronavirus en el norte del país, impulsados por la nueva variante BA.2, informaron hoy autoridades sanitarias, mientras el gobierno advirtió que sus recursos para combatir la enfermedad están “agotados”.
“Vimos un ligero incremento de los casos reportados de Covid-19 en el estado y en la ciudad de Nueva York”, afirmó la directora de la red estatal de Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), Rochelle Walensky.
Agregó que también se observaron “algunos aumentos de personas hospitalizadas por Covid-19 en (el estado) Nueva Inglaterra, específicamente donde la variante BA.2 alcanzó niveles de 50%” de prevalencia.
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La funcionaria advirtió que esa tendencia representa signos prematuros de una nueva ola de contagios, según la agencia de noticias AFP.
La cepa BA.2 no parece causar una forma más severa de la enfermedad que la que provoca la primera variante de Ómicron, BA.1, ni que evada la protección inmunológica, pero es más transmisible.
Actualmente, 35% de los casos en todo Estados Unidos es causado por la variante BA.2 y se espera que pronto sea la cepa dominante en el país.
Estados Unidos registra un promedio de 28.600 nuevos contagios por día, muy por debajo del pico de más de 800.000 en enero pasado.
El repunte de los contagios se produce después de que el Congreso declinara la semana pasada agregar 22.500 millones de dólares al presupuesto asignado al combate al coronavirus.
“En esta etapa, nuestros recursos están agotados”, alertó el secretario de Salud, Xavier Becerra.
Los suministros de tratamientos de anticuerpos monoclonales para los estados fueron recortados en 35% y se prevé que los tratamientos se agoten para mayo.
El coordinador de la respuesta contra la Covid-19 de la Casa Blanca, Jeff Zients, afirmó que había suficientes suministros para poner una cuarta dosis de la vacuna a inmunodeprimidos y en próximas semanas a la población mayor.
“Sin embargo, si la ciencia muestra que la cuarta dosis es necesaria para la población general a fin de año, no tenemos los suministros necesarios para asegurar que hay dosis gratuitas y fácilmente disponibles para todos los estadounidenses”, agregó.
“La inacción en el Congreso nos hará retroceder dejándonos menos preparados y costando más vidas”, advirtió el funcionario.
Con información de Télam
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