En medio de la suba de casos de COVID-19, Francia tomó una fuerte decisión para mantener la estabilidad económica en el país. Para evitar una competencia desleal tomó la decisión de que se prohibiera la venta de "artículos no esenciales" en supermercados.
La decisión del Gobierno de Francia ocurrió dos días después de que el propio poder Ejecutivo prohibiera la venta de libros en hipermercados para no perjudicar a las librerías independientes. Más allá de esta situación, Jean Castex, indicó que a partir del martes se prohibirán las ventas de productos no esenciales en supermercados.
Esta decisión es un paliativo para los pequeños comercios y abrió un fuerte cruce con las grandes cadenas de supermercados quienes tomaron mal la medida. Aun así, Jean Castex tomó esta decisión, ya que los pequeños locales no puede abrir los locales ante la fuerte ola de COVID-19 que llegó al país.
MÁS INFO
El nuevo confinamiento que está vigente en Francia incluye teletrabajo masivo, uso obligatorio de mascarilla desde los seis años y desplazamientos limitados durante un mes, con el objetivo de mitigar la segunda ola de contagios de coronavirus, "más mortífera que la primera" El uso de mascarilla en las escuelas en Francia "se ampliará a los niños de la primaria a partir de los seis años", anunció Castex ante el Parlamento, un día después de que el presidente Emmanuel Macron anunciara un nuevo confinamiento nacional, el segundo del año, para contener el avance del coronavirus.
"A partir del regreso a clases el lunes, el protocolo sanitario será adaptado y reforzado para garantizar la protección de todos los niños, los maestros, los padres de los alumnos", dijo Castex, y precisó que la nueva medida seguía una propuesta del Alto Consejo de Salud Pública.