La pandemia del coronavirus pegó fuertemente en la tasa de desempleo de Estados Unidos que llegó a su nivel máximo desde la Gran Depresión de 1929, con un 14,7% de personas que actualmente están sin trabajo. En abril se perdieron 20,5 millones de puestos en lo que se convirtió en la caída mensual más grave desde que se llevan estadísticas.
En tan sólo un mes, todo el crecimiento registrado en Estados Unidos durante los últimos once años se desplomó a una velocidad inédita, ya que en febrero la tasa de desempleo era de 3,5%, la más baja en medio siglo, mientras que la de marzo era de 4,4%.
El impacto se reflejó en la caída de la proporción de estadounidenses en edad laboral que tienen trabajo: apenas el 51,3%, la más baja desde que se llevan estadísticas.
Además de los nuevos desocupados, 5,1 millones de personas sufrieron la reducción de su jornada laboral en abril, lo que redundó en sueldos mas bajos, menor gasto y la consiguiente profundización de la caída de la economía.
Según informó NA, el índice de subempleo también alcanzó una cifra récord, al llegar a 22,8%. El panorama se explica porque, pese a que muchos negocios comenzaron a abrir lentamente, las fábricas, hoteles, restaurantes, gimnasios, cines y comercios pequeños siguen cerrados.