Por primera vez en décadas, el presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, declaró este martes la ley marcial de emergencia en todo su territorio para, dijo, proteger al país de las "fuerzas comunistas" de Corea del Norte. La ley establece la prohibición de las actividades políticas y la militarización y cierre de la Asamblea Nacional, en donde se concentraron masivas protestas y donde los legisladores aprobaron un rechazo a la medida. La jugada del Presidente duró poco porque casi tres horas después, y luego de que la Asamblea Nacional de mayoría opositora la rechazara, anunció que la levantará.
El titular de la Asamblea Nacional informó que las tropas comenzaron a abandonar el palacio legislativo, según la agencia de noticias nacional Yonhap, mientras algunos líderes opositores salieron a anunciar que el "autogolpe", como lo definieron, fracasó y pusieron en duda si Yoon seguirá al frente del Gobierno.
"Para salvaguardar a una Corea del Sur liberal de las amenazas que plantean las fuerzas comunistas de Corea del Norte y para eliminar a los elementos antiestatales, declaro por la presente la ley marcial de emergencia", dijo Yoon en un discurso por cadena nacional. El presidente surcoreano aseguró que la ley tiene el objetivo de "erradicar las fuerzas afines a Corea del Norte" y garantizar "la libertad y felicidad" de la población surcoreana, una medida que llega en pleno aumento de la tensión entre los dos países.
"Con este fin, aplastaré definitivamente a las fuerzas antiestatales causantes de la ruina que han estado causando estragos hasta ahora. Es una medida inevitable para garantizar la libertad y la seguridad del pueblo, la sostenibilidad del país y heredar a las generaciones futuras un país adecuado frente a las fuerzas antiestatales que pretenden derrocar el sistema", agregó Yoon, según consignó la agencia Europa Press.
El presidente surcoreano aseguró que la militarización es necesaria para "proteger el orden constitucional" en el país asiático, que sigue técnicamente en guerra con Corea del Norte desde los años '50, cuando las partes acordaron un armisticio que puso fin a los combates a falta de un tratado de paz. "Mediante esta ley marcial de emergencia, reconstruiremos y protegeremos la República de Corea libre, que está cayendo en el abismo de la ruina", indicó Yoon, según el medio local Chosun.
Sin embargo, no explicitó ninguna amenaza en concreto que justifique la extrema decisión y, desde la oposición, lo acusan de querer simplemente cerrar el Congreso, un Poder que hace tiempo estaba obstaculizando sus proyectos.
Protestas frente al Parlamento
Tras el anuncio del Presidente fue nombrado comandante bajo la ley marcial el jefe del Estado Mayor Conjunto, Park An-su, quien señaló que las actividades de la Asamblea Nacional y los partidos políticos quedan prohibidos, informó la agencia Yonhap. En imágenes de los canales de televisión locales se observaba el Parlamento de Corea del Sur militarizado y con ciudadanos protestando en las inmediaciones.
El anuncio de la ley marcial llevó al Ministerio de Defensa a convocar una reunión de emergencia con los principales comandantes y altos cargos de las Fuerzas Armadas, un encuentro que tendrá lugar en las próximas horas y en el que se trazarán las medidas a seguir, según indicó esa misma agencia.
Sin embargo, la expectativa está hoy en las calles y, especialmente, alrededor del Congreso, donde la oposición y miles de ciudadanos prometen dar pelea a lo que muchos ya ven como intento por romper o, al menos, suspender el orden constitucional.