Desde hacía un mes, la prensa internacional, principalmente occidental, se preguntaba dónde está Qin Gang, el hasta este martes canciller de China, quien fue visto por último vez el 25 de junio. Tras muchas especulaciones, los medios estatales chinos informaron hoy que el dirigente fue separado de su cargo y que lo reemplaza Wang Yi, el veterano especialista de política exterior que ya había liderado esa cartera entre 2013 y 2022, y que en las últimas semanas venían ejerciendo de hecho las funciones de canciller, actualmente en Sudáfrica, en una cumbre del Brics.
Ni la agencia de noticias china Xinhua y la televisión estatal explicaron las razones de la remoción de Qin y su reemplazo por Wang, el máximo responsable de la diplomacia china pues dirige la política exterior del gobernante Partido Comunista. Solo se limitaron a informar que el presidente Xi Jinping firmó una orden presidencial para promulgar la decisión de apartar a Qin del cargo, según la agencia Télam.
El diario Global Times, un medio muy cercano a la línea oficial del PC chino, también informó que la Asamblea Nacional convocó una sesión especial este martes con dos objetivos: redactar un proyecto de enmienda al código penal y la aprobación de la remoción de Qin y la designación de Wang. Esta última resolución no le quitó el título de Consejo del Estado al ahora ex canciller.
Qin había sido designado en el cargo por el presidente Xi en diciembre pasado y, hace poco más de un mes, en una de sus últimas apariciones en público, se reunió con el secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, durante su reciente visita oficial a China, la primera de un funcionario estadounidense de tan alto rango en cinco años.
Su última aparición pública fue el 25 de junio pasado, cuando se reunió con los cancilleres de Rusia, Vietnam y Sri Lanka, según habían reportado los medios locales.
Quién es el nuevo canciller
Wang, en tanto, había sido un bastión del Ministerio de Relaciones Exteriores hasta el año pasado. Un veterano diplomático de 70 años, comenzó su carrera en la cartera en 1982 como experto en Japón, un vecino clave de la potencia asiática, por la relación de fuerzas regional y, como proxy, de su confrontación con Estados Unidos, el aliado de Tokio desde su derrota en la Segunda Guerra Mundial.
También es experto en la cuestión Taiwán, uno de los ejes de la confrontación actual con Estados Unidos. Fue director de la Oficina de Trabajo de Taiwán del comité central del PC y, luego, ministro de Asuntos de Taiwán en el Consejo Estatal entre 2008 y 2013, año en el que pasó a ser canciller.