En el 49 aniversario, una marea humana conmemoró una fecha que aún hoy marca a todos los chilenos: el golpe dirigido por Augusto Pinochet contra el entonces presidente Salvador Allende. Pero como sucedió en años anteriores, la marcha pacífica y convocada por el Partido Comunista y el Socialista quedó teñida por el accionar de un grupo de encapuchados que provocaron incendios y saqueos y confrontaron con la policía.
Según el diario La Tercera, el saldo final fueron dos carabineros heridos, tres manifestantes detenidos y 8 locales destrozados. El presidente Gabriel Boric repudió los incidentes y afirmó: "La democracia se construye con diálogo, respetando al que piensa distinto y nunca con violencia. Si queremos salir adelante, que no me queda duda, es la voluntad de la gran y abrumadora mayoría de los chilenos, volver a encontrarnos, tiene que ser en paz y sin violencia".
Horas antes, como parte de la conmemoración, Boric había dado un discurso, en el que, en cambio, se centró en el significado que el aniversario del golpe de Estado aún tiene para el país vecino. Recordamos a quienes “fueron desaparecidos sin que hasta hoy conozcamos su paradero, a quienes sufrieron persecuciones, humillaciones y exilios, a quienes en los largos años de la dictadura civil y militar cayeron víctimas de la represión”, aseguró.
El mandatario tuvo palabras especiales para la figura de Salvador Allende en un acto solemne celebrado en el Palacio de la Moneda, al contrario que gobiernos anteriores. “Frente a las divisiones, a los problemas de la sociedad, nosotros vamos a responder con más democracia y nunca con menos”, esa es la enseñanza que nos dejó el presidente Allende, manifestó el mandatario, que atraviesa un momento difícil tras las elecciones del pasado 4 de septiembre y la contundente victoria del rechazo a un nuevo texto Constitucional por un 62% de los ciudadanos.
La marcha por el corazón de Santiago comenzó a la mañana en un clima de tranquilidad. Sin embargo, con el correr de las horas grupos de personas encapuchadas fueron infiltrando a los manifestantes hasta disrumpir completamente la conmemoración.
Carabineros (policía) de Chile informó que se registró una serie de incidentes en el centro de Santiago, que se iniciaron en la Alameda, frente al palacio presidencial de La Moneda y continuaron en la comuna de Recoleta, en las cercanías del Cementerio General, donde cada año finaliza la tradicional movilización en homenaje a las víctimas del golpe, según Télam
"Encapuchados lanzan objetos incendiarios al personal de Control de Orden Público (COP) en Alameda cercano a Teatinos", informó la institución en redes sociales y agregó que "encapuchados lanzan fuegos de artificio al cuerpo de un carabinero, y artefactos incendiarios al personal de COP frente a La Moneda".
Búsqueda de desaparecidos
El mandatario trasandino anunció la puesta en marcha del plan de búsqueda de desaparecidos durante la dictadura de Pinochet, en el marco de las actividades oficiales en conmemoración del golpe.
"Nuestro compromiso es seguir buscando incansablemente a los detenidos desaparecidos, 1.192 detenidos desaparecidos que todavía no sabemos dónde están; no es aceptable, no es tolerable, no lo podemos naturalizar", señaló el presidente.
La iniciativa, que había sido anunciada en junio durante el discurso anual del presidente en el Congreso, propone trabajar junto con las organizaciones de familiares de desaparecidos y ejecutados por motivos políticos. "Ese compromiso es del nunca más, de avanzar en verdad, justicia, reparación para todas las víctimas de violencia ejercida por agentes del Estado, porque esa es la única y principal garantía de no repetición que podemos ofrecer", señaló Boric.
El mandatario comentó también que por la mañana visitó la tumba del presidente derrocado el 11 de septiembre de 1973, Salvador Allende, en el Cementerio General de Santiago. A lo largo del día, diversos grupos políticos y ciudadanos se acercaron a rendir homenaje a la estatua de Allende frente a La Moneda para depositar claveles rojos en su honor.
El gobierno chileno comenzó este domingo la conmemoración del 50mo. aniversario del golpe, que concluirá dentro de un año. La dictadura de Pinochet dejó 40.175 víctimas, entre ejecutados, detenidos desaparecidos, prisioneros políticos y torturados, según cifras de la comisión oficial que recopiló testimonios de víctimas y familiares.