En mayo, los subsidios al sector eléctrico crecieron un 467,2% en comparación con el mismo mes de 2023. En el quinto mes del año pasado los subsidios fueron de $ 89.224, pero en mayo último treparon a $ 506.083. Los datos surgen del Reporte Energético sobre subsidios eléctricos publicado este 1° de julio por la Confederación Argentina de Trabajadores y Empleados de los Hidrocarburos, Energía, Combustible, Derivados y Afines (CATHEDA). Fuentes técnicas a cargo de la elaboración de ese informe indicaron a El Destape que los motivos que impulsaron la suba de los subsidios en mayo son el alto consumo de combustibles líquidos y gasoil para la generación de electricidad en lugar del gas, que es más barato, y –en menor medida- la suba del precio de la generación de energía. Los combustibles líquidos se utilizaron sobre todo para cubrir la suba de la demanda registrada ese mes.
La misma fuente explicó que al principio del gobierno de Javier Milei los subsidios aumentaron por el efecto de la devaluación de 118% de diciembre, implementada por el ministro de Economía, Luis Caputo. “Al estar las tarifas dolarizadas, le aumentaron los costos a las compañías del sector. También se suma un factor determinante que es el aumento del precio a la generación. Por eso, en la primera etapa del nuevo gobierno los subsidios de Cammesa se dispararon”, sostuvo y agregó que “después, con el correr de los meses, esos subsidios se fueron achicando con los aumentos de tarifas. Esto fue así hasta mayo, que volvieron a aumentar los subsidios por el uso de los combustibles líquidos y la suba del precio de la generación”.
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Postergación
El Gobierno tiene el objetivo de quitar todos los subsidios posibles a los servicios públicos de electricidad y gas. Para esto sigue con la política de segmentación tarifaria del gobierno anterior y postergó la implementación de la Canasta Básica Energética (CBE). En lo que va de 2024 subió las tarifas (principalmente en distribución) considerablemente para los hogares de Nivel 1 (altos ingresos) y, en menor medida, al Nivel 2 (ingresos bajos) y Nivel 3 (medios). Pero, luego de la suba a los hogares de alto poder adquisitivo, la intención oficial ahora es reducir los subsidios (que los usuarios paguen el costo real de la energía) fuertemente en los hogares de ingresos medios y bajos.
Este 1° de julio, el Gobierno suspendió un nuevo aumento en las facturas de luz y gas, que impactaba en el precio de la energía, que junto al transporte y la distribución forman los tres segmentos de la factura final que llega a los hogares. El titular del Palacio de Hacienda prefirió hasta el momento pisar la suba de las facturas con más subsidios para intentar contener la inflación.
El mismo informe de CATHEDA destacó también que en mayo el costo del sistema se incrementó un 316% en comparación con el año pasado. En este costo se incluye contempla al precio en pesos que Cammesa compra la energía, que abarca los contratos de las energías renovables, el gas, los combustibles líquidos y hasta el mantenimiento de las máquinas de generación, entre otros factores. Entre enero y abril el costo del sistema eléctrico había bajado casi un 20%. La Nación subsidió casi el 65% del costo del sistema eléctrico y acumula $ 1.681.262 millones entre enero y mayo de 2024, según afirma el mismo informe.
OPC
En tanto, la Oficina de Presupuesto del Congreso relevó que, en lo que respecta a los subsidios energéticos, “es de destacar que las transferencias a la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa) totalizaron en mayo $ 674.072 millones. Es decir, un 64% interanual en términos reales, destinados a cubrir la brecha entre costos y tarifas de la generación eléctrica”.
“En el acumulado a mayo de 2024, los subsidios energéticos presentan una variación negativa de 33,2% real en comparación a los cinco primeros meses de 2023. Las transferencias con destino a Cammesa disminuyeron 4,4% interanual, mientras que las destinadas a ENARSA lo hicieron en 59,3% en la misma comparación”, destaca el informe.