El gobierno británico confirmó hoy la concesión de al menos 100 nuevas licencias de explotación de petróleo y gas, principalmente en el mar del Norte, con el objetivo de fortalecer la independencia energética del Reino Unido y reducir su dependencia de estados hostiles.
"Todos hemos sido testigos de cómo Putin manipuló y convirtió la energía en un arma. Ahora más que nunca, es vital que reforcemos nuestra seguridad energética y aprovechemos esa independencia para brindar energía limpia y más asequible a los hogares y las empresas británicas", declaró el primer ministro británico, Rishi Sunak en una rueda de prensa.
Se espera que esta medida impulse la economía del Reino Unido, respaldando hasta 50.000 empleos en la región del Mar del Norte y ayudando a construir una nueva industria limpia próspera en la región.
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El noreste de Escocia y el Humber, un gran estuario en la costa este del norte de Inglaterra, fueron elegidos como ubicaciones para dos nuevos clústeres de uso y almacenamiento de captura de carbono.
La Autoridad de Transición del Mar del Norte (NSTA) anunció un compromiso conjunto con el gobierno británico para emprender futuras rondas de licencias, sujetas a una prueba de compatibilidad climática.
Las licencias también podrían ofrecerse cerca de áreas ya autorizadas, desbloqueando reservas vitales y poniéndolas en línea rápidamente.
El ministro de Seguridad Energética británico, Grant Shapps, enfatizó la importancia de estas licencias.
"Tras la bárbara invasión de Ucrania por parte de Putin, nuestra seguridad energética es más importante que nunca. Las nuevas licencias de petróleo y gas reforzarán la independencia energética y la economía del Reino Unido durante generaciones", subrayó Shapps.
Un nuevo análisis de la NSTA muestra que la huella de carbono de la producción doméstica de gas es alrededor de una cuarta parte de la huella del gas natural licuado importado.
La concesión de estas nuevas licencias es parte del compromiso del gobierno británico de alcanzar cero neto para 2050, al mismo tiempo que protege más de 200.000 empleos en una industria vital.
El gobierno británico dijo que la inversión continua en el Mar del Norte permitirá la implementación de nuevos proyectos, la protección de empleos, la reducción de emisiones y la promoción de la independencia energética del Reino Unido.
"La industria del petróleo y el gas británico también será crucial en la inversión en tecnologías limpias, como la captura y el almacenamiento de carbono, que son fundamentales para el objetivo de cero emisiones", indicó Shapps.
Sin embargo, la decisión fue criticada por grupos ecologistas, quienes ven la medida como "peligrosamente incoherente" y contraproducente para los esfuerzos globales contra el cambio climático.
Por su parte, Philip Evans de Greenpeace Reino Unido calificó el anuncio como una maniobra política cínica, mientras que otros expertos cuestionaron la eficacia de la medida para reducir las facturas de energía.
Los críticos también señalaron que la medida parece contradecir los compromisos del Reino Unido en materia de reducción de emisiones y podría dañar la credibilidad internacional de Sunak.
Mike Childs, jefe de política de Amigos de la Tierra, enfatizó que la credibilidad internacional de Sunak está en juego, y Lyndsay Walsh de Oxfam criticó la medida como un ejemplo de política climática hipócrita y peligrosamente inconsistente, según consignó el diario The Guardian.
Con información de Télam