El Fondo Monetario Internacional (FMI) y Argentina tienen un entendimiento común para trabajar juntos y mejorar los fundamentos económicos del país, pero "todavía queda mucho por hacer". Estas fueron las declaraciones de la directora del Fondo, Kristalina Georgieva, en medio de las frenéticas negociaciones entre nuestro país y el organismo multilateral de crédito.
La jefa del FMI destacó "la importancia de trabajar hacia un programa que mejore significativamente los fundamentos macroeconómicos de Argentina y coloque a Argentina en una senda sólida para recuperarse de esta crisis". Al mismo tiempo, expresó a la agencia Reuters: "Hemos trabajado hasta ahora de manera constructiva, pero aún queda mucho por hacer".
El pedido del FMI al G20
Mientras negocia los últimos detalles del acuerdo con la Argentina, el FMI pidió avanzar en el diseño de un tratamiento especial de la deuda para los países pobres. El organismo multilateral de crédito advirtió que muchos de ellos podrían sufrir un "colapso económico" si no cuentan con esa ayuda.
"Es posible que veamos un colapso económico en algunos países a menos que los acreedores del G20 acuerden acelerar una reestructuración de la deuda y suspendan su servicio mientras negocian esa reestructuración", afirmó en un blog la titular del organismo multilateral. En una columna en coautoría con Ceyla Pazarbasioglu, titulada "Debe reforzarse el marco común del G20 para el tratamiento de la deuda", Georgieva apuntó que "es fundamental" que los acreedores privados también ofrezcan alivio.
La Iniciativa de Suspensión del Servicio de la Deuda del G20 (DSSI) expira a fin de año y, si no se renueva, varios países podrían sufrir presiones financieras y recortes de gastos en momentos en que se extiende una nueva variante de coronavirus y se espera un aumento de las tasas de interés. Y enfatizó: "Los desafíos de la deuda son apremiantes y la necesidad de acción es urgente. La reciente variante ómicron es un claro recordatorio de que la pandemia estará con nosotros por un tiempo".
Dados los problemas con el programa de alivio de la deuda y el marco común para tratar con los acreedores privados, hasta ahora sólo tres países solicitaron el aligeramiento de esa carga (Chad, Etiopía y Zambia) y enfrentan "retrasos significativos" en sus pagos. El marco operativo "aún debe cumplir con su promesa. Esto requiere una acción rápida", finalizó la funcionaria del FMI.