Los principales institutos económicos de Alemania recortaron el jueves su previsión conjunta de crecimiento para 2021 en la mayor economía de Europa hasta el 2,4%, ya que los cuellos de botella de la oferta siguen obstaculizando la fabricación, al tiempo que elevaron significativamente sus expectativas para el próximo año.
Los cinco institutos —el RWI de Essen, el DIW de Berlín, el Ifo de Múnich, el IfW de Kiel y el IWH de Halle— elevaron su previsión para 2022 del 3,9% al 4,8%, afirmando que la economía alcanzará una utilización normal de la capacidad en el transcurso del año, a medida que el impacto de la pandemia de coronavirus vaya disminuyendo.
El miércoles, Reuters adelantó que los institutos planeaban recortar su previsión para 2021, que se situaba en el 3,7%.
"Los retos del cambio climático y el previsible menor crecimiento económico debido a la disminución de la mano de obra reducirán las oportunidades de consumo", dijo Oliver Holtemoeller, del IWH.
El sector manufacturero mundial se ha visto afectado por la escasez de componentes, la obstrucción de los puertos y la falta de contenedores de carga. La escasez de mano de obra se ha sumado al caos tras los cierres provocados por la pandemia del año pasado.
El Ministerio de Economía alemán dijo que era probable un aumento del PIB del país en el tercer trimestre gracias al crecimiento de los servicios, aunque se espera que el crecimiento se estanque hacia finales de 2021.
Los cinco institutos esperan que la inflación sea del 2,5% en 2022 y del 1,7% en 2023.
Con información de Reuters