El gobierno chino planea intervenir por la fuerte crisis energética

21 de octubre, 2021 | 07.48

Los futuros del carbón térmico de China cayeron el jueves el máximo permitido, un 11%, ampliando las pérdidas acumuladas desde el martes, cuando Pekín señaló que podría intervenir para moderar los precios al alza que han provocado escasez de energía en gran parte del país.

China está presionando a las mineras para que aumenten la producción de carbón y las importaciones con el fin de que las centrales eléctricas puedan reconstituir sus reservas antes del inicio de la temporada de calefacción de invierno.

Los futuros de carbón térmico más activos del país cayeron al límite en la apertura, hasta los 1.587,4 yuanes (248,28 dólares) por tonelada. Han bajado casi un 20% desde el máximo histórico de 1.982 yuanes por tonelada alcanzado el martes, pero aún así se han multiplicado por más de tres en lo que va de año.

Los futuros del carbón coquizable y del coque en la Bolsa de Productos de Dalian también ampliaban las pérdidas.El carbón coquizable en Dalian se desplomó un 8,8% hasta los 3.220 yuanes la tonelada y los futuros del coque cayeron un 4,8% hasta los 3.964 yuanes la tonelada a primera hora de la tarde.

A pesar de las recientes oscilaciones de los precios del carbón, se espera que los costes generales de la energía, la mano de obra y otros costes persistan y se repercutan en los consumidores finales, según los economistas y analistas.

El planificador estatal de China, la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma (CNDR), dijo el martes que estaba estudiando formas de intervenir para bajar los precios del carbón y que tomaría todas las medidas necesarias para llevarlos a un rango razonable, después de convocar una reunión de las principales empresas de carbón y la asociación del sector.

La escasez de carbón, el principal combustible de China para la generación de energía, ha provocado el racionamiento de la electricidad para la industria en muchas regiones, lo que ha perturbado la producción y ha pesado en el crecimiento económico de la segunda mayor economía del mundo.

China es el mayor productor y consumidor de carbón del mundo, y ha aumentado la producción para satisfacer la demanda.

"La subida de las tarifas fue inadecuada para hacer rentables a la mayoría de los productores independientes de electricidad a base de carbón", dijeron los analistas de Citi en una nota a los clientes el jueves.

China no es la única que intenta frenar al ascenso meteórico de los precios de la energía. Las autoridades desde Pekín hasta Berlín están tomando medidas para tratar de contener las crecientes presiones inflacionistas que ponen en peligro la recuperación mundial de la pandemia del COVID-19.

Pekín ha intentado reducir su dependencia de la energía de carbón contaminante en favor de la energía eólica, solar e hidráulica, más limpias.

Los analistas de Citi prevén que la generación de electricidad con carbón en China se reduzca en un 86%, pasando de 4.658 millones de megavatios hora (MWh) en 2020 a 653 millones de MWh en 2060, sustituidos por la producción de centrales eléctricas de energías más limpias.