El aumento de los precios al consumo hace que 15,2% de los adultos alemanes no pueda hacer frente a sus gastos cotidianos, según una encuesta hecha pública hoy.
Hace tres meses esa tasa era de 11%, según un sondeo del instituto demoscópico YouGov encargado por Postbank, filial de Deutsche Bank, recordó la agencia DPA.
Los hogares con ingresos netos mensuales inferiores a 2.500 euros, casi una cuarta parte (23,6%) afirma tener dificultades para hacer frente a sus gastos habituales debido al alza de los precios; cuando hace tres meses se situaba en 17%.
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En marzo, la inflación interanual en Alemania se disparó hasta 7,3 por ciento, la más alta desde la reunificación de Alemania en 1990.
Desde hace meses, los precios de la energía la han impulsado y la guerra en Ucrania ha acentuado la tendencia.
"Los ingresos no pueden seguir el ritmo de la inflación", analizó el economista jefe de Postbank, Marco Bargel.
"Mientras que los sueldos y salarios en Alemania subieron recientemente 3,6% interanual, el coste de la vida aumentó 7,3%", agregó.
Más de la mitad (53,4%) de los encuestados dijo estar muy preocupado por el aumento de los precios, frente al 44% de hace tres meses.
El 61,3% de los encuestados reclamó más apoyo del Estado, ya que, en su opinión, el "paquete de ayuda" lanzado por el Gobierno no es suficiente para mitigar los efectos de la inflación.
El Gobierno del canciller Olaf Scholz bajó el impuesto sobre la energía durante tres meses para abaratar los combustibles.
Además, los contribuyentes recibirán una ayuda única de 300 euros y las familias recibirán una bonificación de 100 euros por hijo.
Según las estimaciones del Ministerio de Finanzas, el costo total para el Estado se acercará a los 16.000 millones de euros, incluido el primer paquete de ayuda, establecido en febrero.
Con información de Télam