La primera revisión prevista en el marco del acuerdo recientemente rubricado por la Argentina y el FMI fue adelantada para mayo. Esto se debe a las contingencias económicas derivadas de la guerra entre Rusia y Ucrania, como el incremento del costo de las importaciones a nivel energético y la suba exponencial de las materias primas.
El directorio del FMI, que el último viernes votó a favor del acuerdo que permite refinanciar los vencimientos de los 45.000 millones de dólares de la deuda contraída por la administración de Mauricio Macri, señalaron que "los efectos secundarios de la guerra se están materializando", por lo que se manifestaron a favor de la propuesta de adelantar una primera revisión del programa. "Los directores acordaron que el programa está sujeto a riesgos excepcionalmente altos", indicaron en un comunicado.
Fuentes gubernamentales también confirmaron a El Destape que la primera revisión se llevará a cabo en mayo y no en junio. Los motivos puntuales son la suba del GNL que importa nuestro país y el alza inusitado de las commodities, que impacta sobre los costos en el mercado interno.
Qué había dicho el FMI
La directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, afirmó que el acuerdo que aprobó el board del organismo para la Argentina "establece objetivos pragmáticos y realistas, junto con políticas creíbles para fortalecer la estabilidad y comenzar a abordar desafíos profundamente arraigados". Aún así, remarcó que debido a las consecuencias de la guerra entre Rusia y Ucrania, el programa podría ser recalibrado para lograr los objetivos planteados en el entendimiento.
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A través de un comunicado, la economista advirtió: “Los riesgos para el programa son excepcionalmente altos y los efectos secundarios de la guerra en Ucrania ya se están materializando". En este contexto, señaló: "La recalibración temprana del programa, incluida la identificación y adopción de medidas apropiadas, según sea necesario, será fundamental para lograr los objetivos del programa”.
La directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, afirmó que el acuerdo que aprobó el board del organismo para la Argentina "establece objetivos pragmáticos y realistas, junto con políticas creíbles para fortalecer la estabilidad y comenzar a abordar desafíos profundamente arraigados". Aún así, remarcó que debido a las consecuencias de la guerra entre Rusia y Ucrania, el programa podría ser recalibrado para lograr los objetivos planteados en el entendimiento.
A través de un comunicado, la economista advirtió: “Los riesgos para el programa son excepcionalmente altos y los efectos secundarios de la guerra en Ucrania ya se están materializando". En este contexto, señaló: "La recalibración temprana del programa, incluida la identificación y adopción de medidas apropiadas, según sea necesario, será fundamental para lograr los objetivos del programa”.
Tras la aprobación del acuerdo, el pasado viernes, se activó inmediatamente el giro de 9.650 millones al país, que pasó a aumentar las reservas del Banco Central. De esta forma la Argentina podrá hacer frente a los vencimientos que tiene con el organismo este mes, en torno a 2.800 millones de dólares, y tendrá un resto para acumular reservas y ayudar a cumplir la pauta con el Fondo de acumular unos 5.800 millones de dólares a lo largo del año.
Tras la revisión de mayo, de cumplir la Argentina con las pautas previstas, el organismo daría luz verde a un segundo desembolso, en este caso de alrededor de 4.000 millones de dólares.
Con información de Télam