El chino Li Fabin revalidó el miércoles su título olímpico de halterofilia en los Juegos de París, con un levantamiento total de 310 kg, pero se quedó a las puertas de batir su propio récord mundial.
El tricampeón del mundo comenzó con un levantamiento récord olímpico de 143 kg en el snatch de su tercer intento y se aseguró el oro al levantar 167 kg en su segundo intento en el clean and jerk.
En su tercer intento tenía 172 kg cargados en la barra, lo que habría batido la marca mundial total de 318 kg que estableció en los campeonatos del mundo de 2019 en Tailandia.
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El atleta de 31 años se colocó la barra en el pecho pero, a pesar de estirar cada tendón, su pierna derecha se dobló cuando intentó levantar el peso por encima de su cabeza y tuvo que dejarla caer a la colchoneta.
La competencia había comenzado tras un retraso de media hora en una Expo París dividida a partes iguales entre ruidosos aficionados chinos y estadounidenses.
El tailandés Theerapong Silachai se colgó por sorpresa la medalla de plata en un emocionante final tras levantar unos impresionantes 171 kg en el clean and jerk para un total de 303.
El estadounidense Hampton Morris terminó tercero en la final por el bronce, con un total de 298 kilos, tras fallar en su último intento con 178 kg en el clean and jerk, un levantamiento que habría mejorado el récord mundial de 176 kg que estableció en Tailandia en abril.
Con información de Reuters
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