El 1° de mayo de 1994, el mundo del automovilismo vivió una de sus tragedias más grandes con la muerte de Ayrton Senna, uno de los pilotos más talentosos y admirados de la Fórmula 1. Treinta años después, nuevos detalles sobre el accidente que costó su vida siguen saliendo a la luz.
Recientemente, el médico italiano Alessandro Misley, quien formaba parte del equipo de rescate del Autódromo Enzo e Dino Ferrari en los años 90, brindó una entrevista en la que explicó las verdaderas causas del fallecimiento de Senna.
La verdadera causa de la muerte de Senna
A lo largo de los años, se especuló mucho sobre las causas del trágico accidente que terminó con la vida del brasileño. Una de las teorías más comentadas sostiene que el impacto de la barra de suspensión del Williams de Senna fue el factor principal en su muerte. Según esta versión, la barra se soltó tras el impacto y golpeó la visera del casco, lo que causó una grave lesión en su frente.
Sin embargo, Alessandro Misley desmintió esta teoría en su entrevista. "Si la barra de suspensión fuera la causa, Senna estaría vivo", afirmó rotundamente el médico. Misley explicó que, si bien el trozo de suspensión entró en el casco y causó una lesión en su frente, esa herida no fue mortal. La verdadera causa de la muerte de Senna fue una fractura en la base de su cráneo, ocasionada por el fuerte impacto y la desaceleración brusca del coche al chocar contra la barrera de neumáticos. “La lesión por la barra de suspensión fue secundaria y no letal”, señaló.
Los dramáticos momentos en la pista
Misley recordó cómo fue el instante en que recibió el llamado para asistir al piloto accidentado. En ese momento, no se sabía quién estaba involucrado en el accidente, pero al llegar al lugar, el estado de Senna era evidentemente grave. "Los signos vitales estaban alterados, había sangre en la boca y la nariz, y lamentablemente, materia cerebral esparcida por todo el lugar", relató el médico.
Senna, quien circulaba a más de 300 km/h en la séptima vuelta del Gran Premio de San Marino, perdió el control de su vehículo después de que la barra de dirección del Williams se rompiera. El coche siguió recto por la curva Tamburello, impactando violentamente contra la barrera. La desaceleración en tan solo un segundo fue devastadora para el piloto.
La lucha por la vida de Senna
A pesar de los esfuerzos del equipo médico, que incluyeron aspiración, ventilación y oxigenación, Senna perdió la vida en el Hospital Maggiore de Bolonia, horas después del accidente. La noticia conmovió al mundo del deporte, y la figura del piloto brasileño sigue siendo recordada y homenajeada cada año.
¿Por qué no hubo detenidos?
Aunque el accidente generó muchas preguntas, en cuanto a responsabilidades legales, el caso fue complicado. En 1997, tres años después de la tragedia, seis personas fueron acusadas por el accidente, pero todos fueron absueltos. El juicio estableció que no había pruebas suficientes para demostrar la causa del accidente. En 2007, Patrick Head, director técnico de Williams, fue considerado responsable de homicidio involuntario por negligencia al cambiar la columna de dirección del coche, pero la sentencia fue dictada 13 años después del incidente, por lo que no se cumplió ninguna condena debido a la prescripción del caso.
Hoy, 30 años después de la muerte de Senna, su legado sigue vivo y continúa siendo una inspiración tanto para los fanáticos del automovilismo como para el deporte en general.