Así como los pilotos deben demostrar resultados a sus equipos, cada país que tenga un Gran Premio de la Fórmula 1 debe cumplir una cierta cantidad de normas o resultados esperados. De hecho, hace relativamente poco tiempo nos despedimos del GP de Alemania y del GP de Francia, ambos por falta de convocatoria y falta de compromiso por parte de las autoridades de dichas naciones para promocionar la F1 en su territorio.
Pero también hay ocasiones en las que se analizan otras cosas, como el estado de la pista o las condiciones climáticas adversas, algo que puso en duda la continuidad del GP de Bélgica en 2022. Ahora bien, hay un caso que quedó grabado en la retina de los apasionados del automovilismo y fue durante el GP de los Estados Unidos, pero no en su versión actual que se corre en el Circuito de las Américas de Austin, sino cuando se compitió en el anillo de Indianápolis.
Dicho circuito, famoso por su uso en la IndyCar, ha sido escenario de diversos accidentes en la Fórmula 1 entre 2000 y 2007 y fue el causante de estar a punto de dejar al país norteamericano sin Gran Premio. Y es que, durante la edición del 2005, Ralf Schumacher sufrió un fuerte accidente en la práctica del viernes y su coche quedó con los neumáticos izquierdos completamente destruidos.
El problema fue que el coche de Williams no fue el único que presentó este inconveniente, sino que un total de otros seis equipos tuvieron cortes y un desgaste excesivo en las gomas de Michelin. A causa del choque del alemán, los demás equipos decidieron retirar sus autos para preservar a sus pilotos, mientras que las tres escuderías restantes corrieron porque no tenían a Pirelli como proveedor de neumáticos, sino a Bridgestone.
La decisión causó tal desazón entre los aficionados que la Fórmula 1 estuvo a punto de cancelar la cita en Indianápolis luego de ver tan solo seis coches corriendo en el GP de los Estados Unidos. Para aminorar las críticas, Michelín tuvo que hacerse cargo de las devoluciones del dinero al público, además de que garantizó 20 mil entradas para la siguiente edición de la cita en Indianápolis, que desde entonces fue recordada como “Indygate”.
Los GP de Fórmula 1 que tiene Estados Unidos
Cuando se cumplió el contrato en 2007 del circuito de Indianápolis, la Fórmula 1 no volvió a pisar el famoso anillo y los Estados Unidos se quedaron sin Gran Premio por algunos años. Pero en 2012 volvió con el Circuito de las Américas de Austin y en los últimos años sumó otras dos citas, una en Miami desde 2022 y el año pasado se corrió por primera vez en Las Vegas luego de cuarenta años.