John Wayne Gacy: la aterradora historia del payaso asesino que llegó a Netflix

Un repaso por la macabra historia de John Wayne Gacy, el monstruo vestido de payaso que asesinó al menos 33 niños y protagoniza una docuserie de Netflix.

25 de abril, 2022 | 20.26

Netflix añadió a su catálogo Conversaciones con asesinos: las cintas de John Wayne Gacy, una macabra serie documental que explora la historia de un asesino que bajo el maquillaje de un payaso de fiestas infantiles cometía los crímenes más sádicos. ¿Quién fue John Wayne Gacy, el monstruo que abusó sexualmente y mató al menos 33 niños?

John Wayne Gacy tuvo una dura infancia en Crest Hill, Illinois (Estados Unidos) por culpa de un padre maltratador y alcohólico. Él mismo sufrió abusos de un amigo de la familia cuando tenía solo nueve años y nunca tuvo una vida sexual saludable. En 1968 fue condenado por abuso sexual a menores y, tras 18 meses en prisión, trató de rehacer su vida. Entre 1972 a 1978 secuestró, torturó, abusó y estranguló a, al menos, treinta y tres jóvenes de edades entre los catorce y los veintiún años.

Al mismo tiempo se convirtió en un querido miembro de su comunidad, un ferviente miembro del Partido Demócrata y una figura que todos los niños querían gracias al personaje al que encarnaba en las fiestas: Pogo, el payaso. Sobre sus asesinatos se sabe que veintiséis de las víctimas fueron encontradas enterradas en el sótano de su propia casa, mientras que restos de otras cuatro fueron encontradas en el río Des Plaines e incluso también en el jardín de casa de su madre. En la cárcel se convirtió en pintor y sus obras, algunos autorretratos de él como payaso, llegaron a ser exhibidas en alguna galería de arte

Luego de ser sentenciado a la pena de muerte en mayo de 1994, John Wayne Gacy pronunció unas últimas palabras que daban cuenta de su instinto asesino y su nulo arrepentimiento. "Matarme no hará regresar a ninguna de las víctimas. ¡El Estado me está asesinando! ¡Nunca sabrán dónde están los otros!", vociferó el sádico payaso asesino.

Además, en su defensa Gacy alegó que no fue él sino su alter ego, Pogo el Payaso, quien había cometido los crímenes. Los estudios psicológicos a los que fue sometido no fueron concluyentes pero apuntaba a que sus terribles impulsos criminales tenían su origen en su padre, quien le maltrataba física y psicológicamente, además de abusar físicamente de su madre, y en la no aceptación de su homosexualidad.