No hay dudas que junto a las empanadas y el asado, las milanesas son uno de los alimentos que los argentinos más consumen, ya sea por su facilidad o por su sabor. Aunque hay una receta que las lleva a otro nivel como es la versión napolitana. Una que esconde un tremendo secreto que pocos conocen y pone en duda la autenticidad de su nombre.
La sencilla tarea de tomar una milanesa, ponerle queso, un poco de salsa de tomate y una feta de jamón para que terminen de fusionarse en el horno es una idea que decanta en uno de los platos más consumidos en la gastronomía de la Argentina. Además, su acompañamiento suele ser una considerable porción de papas fritas. Sin embargo, lo que muchos ignoran es que el nombre que bautiza a esta comida es que esconde un conflicto bélico.
"La verdadera contradicción es la milanesa napolitana. Milaneses y Napolitanos son como ingleses y escoceses", expresó un hombre en Twitter sobre uno de los platos que más se consume en el país. Este error puede tener muchas causas, pero hay una que permite explicarlo desde el punto de vista militar y social. En la primera guerra italiana de 1494, el sur de la península fue invadido por Carlos VIII de Francia para hacer valer su derecho al acceso al trono napolitano. Y en el camino recibió ayuda de ducado de Milán.
Por otro lado, el fútbol permite entender que este nombre del plato es una contradicción, debido a que en el Calcio es muy marca la rivalidad que existe entre los clubes del norte con los del sur. Los primeros postergaron a los segundos en la consagración de títulos nacionales. Algo que fue producto del poderío económico que ostentaban. No es casualidad que Diego Armando Maradona fue y es muy querido en Napoli, ya que ayudó a romper con una clara hegemonía.
¿Cómo nació la milanesa napolitana?
Hay dos historias muy marcadas sobre el origen de la milanesa napolitana, pero lo importante a destacar es que fue en la Argentina. La primera señala que se produjo en un restaurante llamado Napoli que se encontraba cerca del Luna Park. Una noche, una persona decidió resolver un plato quemado colocando queso, tuco y unas rodajas de tomate para disimular el error que había cometido por parte de un descuido que era producto de la gran cantidad de trabajo que estaba afrontando.
Mientras que otra versión sostiene un origen algo similar. Porque el historiador Daniel Balmaceda cuenta en uno de sus libros que la milanesa napolitana nació en un intento de recrear una de las pizzas más populares del sur de Italia pero con un vuelta de tuerca. Esto provocó que se decida agregarle al pedazo de carne un poco de queso y algunas rodajas de tomate.
Por otro lado, la historia sobre el origen de la milanesa es una mucha más compleja, debido a que se trata de un plato que se importó desde Europa y hasta el momento hay gran cantidad de dudas de quién es el verdadero dueño. Algunos señalan que es de Italia, pero hay fuentes que exponen que fue hecha por primera vez en Austria, y en Alemania reclaman un poco de participación porque también poseen de un preparado similar de larga tradición.
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