En el pintoresco pueblo de Coronel Pringles, en el sudoeste de la provincia, la naturaleza se muestra en todo su esplendor. La flora autóctona, los arroyos y el cordón serrano Pillahuinco, forman una combinación única que enamora a quienes la visitan en una escapada de fin de semana.
Uno de sus principales atractivos es el Senderos de Fra-Pal, un predio que abarca 330 hectáreas y alberga más de trescientas especies de animales en total libertad. Entre ellos se encuentran ciervos, búfalos, multicuernos, llamas y muflones, que conviven de manera armoniosa sin estar confinados en corrales.
La increíble propuesta de Fra-Pal, bajo la coordinación de Paola García, una guía naturalista local, ofrece diversas actividades para adentrarse y disfrutar de la naturaleza en su estado más puro. Senderismo con avistaje de animales, trekking por las sierras, cicloturismo, caminatas nocturnas bajo las estrellas o durante las noches de luna llena, y campamentos rurales con fogón y cena, son solo algunas de las experiencias inolvidables que brinda este emprendimiento.
Al finalizar las actividades, los visitantes tienen el placer de disfrutar de una deliciosa picada serrana, compuesta por productos artesanales elaborados como pan casero, quesos, escabeches y chorizos secos.
Durante el recorrido hacia el Cerro La Adolfina, se pueden apreciar monumentos megalíticos cargados de historia, rodeados de la increíble belleza natural de Pillahuinco. La región está cubierta por pastizales pampeanos serranos y árboles vernáculos, como el piquillín, que llevan consigo siglos de antigüedad.
"Quienes nos visitan se sorprenden con el lugar y lo llaman la pequeña África, debido a la similitud del paisaje con el continente africano", revela orgullosa Paola García. También agradecen la oportunidad de disfrutar de la naturaleza en su estado más puro y de escuchar relatos sobre el pasado y los nativos que habitaron la zona. Según los visitantes, estas experiencias los hacen vivir la magia de lo simple y sencillo.
La promoción de Fra-Pal se lleva a cabo principalmente a través de las cuentas de Facebook e Instagram llamadas "Fra-Pal también existe", las cuales fueron creadas por Paola para difundir y reivindicar la belleza de este rincón a través de sus propias fotografías.
Qué hacer en Coronel Pringles
- Patrimonio arquitectónico: en el centro de la ciudad, el Palacio de Gobierno, las ramblas y la Plaza Juan Pascual Pringles conforman una unidad de estilo Art-Decó, característico de principios de siglo.
- Balneario Municipal: en la periferia de la localidad sobre un brazo del arroyo Pillahuincó, que se canalizó para su aprovechamiento, está el Balneario Municipal que se extiende en un predio de ocho hectáreas rodeado de vegetación y luciendo un lago artificial apto para bañarse. Se accede por ruta provincial 51, intersección Blvr.40, hasta llegar a calle Colón, continuando unos 400 metros hasta llegar al atractivo.
- Turismo rural: Coronel Pringles ofrece como una importante alternativa turística el disfrute del entorno rural donde las actividades y el ámbito rural del campo se convierten en un atractivo turístico de suma relevancia. Las estancias rurales constituyen una de las más destacadas y novedosas alternativas de turismo en esta localidad y presentan a los visitantes que las eligen como estadía una oferta compuesta por una gran variedad de propuestas. Proporcionan posibilidades de descanso y relax, amplias extensiones de terreno y características admirables, actividades programadas, recorridos, variedad gastronómica, paisajes únicos, y muchas cosas más.
MÁS INFO
Cómo llegar a Coronel Pringles
Para llegar a este pequeño pueblo rural desde CABA, en auto, tenés que tomar la Autopista 25 de Mayo hasta la Autopista Ezeiza hacia la Ruta Nacional 3. Luego, a la altura de Azul, debés que tomar la Ruta Provincial hasta Coronel Pringles. El viaje es de 509 kilómetros.
La duración del viaje es de 6 horas, pero puede variar según el tránsito.