Micrófono abierto en TN: la repudiable frase tras la muerte en el obelisco

El periodista opositor lanzó un repudiable comentario en TN que salió en vivo por un micrófono abierto.

10 de agosto, 2023 | 22.54

A tan solo horas que se confirmara la muerte de Facundo Molares Shonfeld, el manifestante que "se desplomó por un infarto" en medio de la represión por la protesta en el Obelisco, salió al aire un repudiable comentario al aire de TN. Debido a un descuido de un micrófono abierto, se escuchó a un reconocido periodista del canal hablar sobre el hecho que también tiene como protagonistas a los efectivos de la Policía de la Ciudad.

Mientras pasaban el reporte oficial en donde contaban la situación que atravesó Molares, que según el titular del SAME se "desplomó" a las 17:08 de la tarde y "cayó" al piso, quedó abierto en micrófono de Nicolás Wiñazky. Entonces, se filtró una repudiable frase que el periodista quiso decir detrás de cámaras pero que terminó saliendo al aire.

"Se van a dar cuenta que lo mataron", dijo Wiñazky. Con esta frase, el periodista refuerza las versiones en donde se ve cómo Molares está tirado en el piso mientras es reprimido por los efectivos de la Policía de la Ciudad que estaban reprimiendo la protesta pacífica. Por el momento, el comunicador no aclaró nada sobre sus dichos.

Quién era Facundo Molares Shoenfeld, el militante que murió en la protesta en el Obelisco

Facundo Molares Shoefeld, militante de izquierda y fotoperiodista, fue la persona que murió tras haberse descompensado, en el marco de la represión de efectivos de la Policía de la Ciudad a una protesta que se realizaba frente al Obelisco. La situación se dio en horas de la tarde de este jueves.

Molares Shoefeld tenía 47 años y nació en el municipio bonaerense de San Miguel y después se instaló en Chubut. Inició su militancia en la Juventud Comunista y recorrió Ecuador, Cuba, Paraguay, Brasil, Perú, Chile, Bolivia y Colombia. En estos dos últimos países fue donde Molares Shoefeld más vivió. 

En este último país se sumó a las Fuerzas Armadas Revolucionarias Colombianas (FARC), donde era conocido por el apodo de "el argentino" o "Camilo". En 2003 se sumó a la Columna Teófilo Forero en Los Pozos donde fue instructor político.

Tras dejar las FARC, en 2019 partió hacia Bolivia para retratar el golpe de estado que puso a Jeanine Añez en el poder, acusado por supuesto homicidio, asociación delictuosa e instigación pública a delinquir durante los conflictos que se desataron después de las elecciones en las que se impuso Evo Morales.

En ese marco, recibió tres disparos. “Estuve a punto de morir, 23 días en coma inducido, y los médicos que me salvaron terminaron presos. Perdí casi toda la visión en el ojo derecho y tengo un problema cardíaco por las balas de los golpistas. Terminé preso 13 meses acusado de terrorista en Chonchocoro, la cárcel de máxima seguridad, a casi 5000 metros de altura en el Altiplano. Enfermé dos veces de Covid, dormí meses sentado contra la pared", comentó Molares Shoefeld en una entrevista con el portal ANRed.

En 2020 fue extraditado a Argentina. Sin embargo, en 2021 fue detenido en Chubut por un operativo de la Policía Federal, a raíz de un pedido de extradición de la justicia colombiana. Molares Schoenfeld fue acusado de intervenir en el secuestro de Armando Acuña, un exconcejal del municipio de Garzón-Huila, en el año 2009. En ese momento, el reportero gráfico fue internado, según especificó una nota La Izquierda diario, por un cuadro "de fiebre e hipertensión" en el hospital del penal de Ezeiza.

En junio de este año, la Justicia argentina le otorgó la excarcelación, luego de que la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) de ese país rechazara un pedido de extradición en su contra. "Duele el sacrificio. No es gratis, perdés todo. Yo no tengo familia, hijos, casa, auto. Nada. Tengo 300 libros que son todos mis bienes. Y un cepillo de dientes que cambio cada tres meses", dijo a Telam a fin de mes pasado, en el última entrevista que se le hizo.