Las leguminosas constituyen un fundamento crucial en cualquier régimen alimenticio balanceado y saludable. Además de su elevado contenido nutricional que las convierten en un superalimento, se destacan por su accesibilidad económica y su diversidad culinaria. Entre todas las leguminosas, las arvejas se destacan como la preferida de muchos, reconocidas por sus numerosos beneficios para el bienestar y su fácil incorporación en diversos platos.
Gracias a su combinación de fibra y proteína, las arvejas son muy saciantes, lo que las convierte en un aliado perfecto para aquellos que deseaban controlar su peso o seguir una alimentación balanceada. Además, son una excelente fuente de minerales como el hierro, que es esencial para transportar el oxígeno en el organismo, y el zinc, que fortalece el sistema inmunológico.
La diversidad culinaria también fue un factor a tener en cuenta al hablar de las arvejas. Se pueden preparar en una gran variedad de platos, desde sopas y guisos, hasta ensaladas y hamburguesas vegetarianas. Su versatilidad permite jugar con diferentes sabores y texturas, brindando opciones deliciosas y nutritivas para todos los gusto.
Además, un estudio de la Universidad de Harvard recomendó consumirlas 4 veces a la semana para cuidar tu cerebro gracias a sus propiedades nutritivas que mejoran el funcionamiento cognitivo. De acuerdo al informe, publicado en la revista Harvard Health Publishing, por cada 100 gramos de arvejas se ingiere un total de 3.3 gramos de hierro, claves para la producción de hemoglobina y la prevención de la anemia.
Propiedades de las arvejas
- Protección del sistema nervioso: son una fuente de fósforo y vitaminas. El complejo B favorece la función nerviosa; la vitamina B3 te protege de sufrir insomnio, trastornos de nervios, alteraciones de la memoria o desequilibrios emocionales; las vitaminas B6 y B9 regulan el sistema nervioso central y evitan la irritabilidad. Por último, la vitamina B12 favorece a las células ubicadas en el sistema nervioso. Además, su contenido de carbohidratos complejos permiten un óptimo funcionamiento del cerebro, mejorando la capacidad de concentración y el rendimiento cognitivo.
- Previene el estreñimiento: las arvejas son ricas en las fibras insolubles que promueven un adecuado funcionamiento intestinal, favorecer la digestión, ayudar a eliminar las grasas saturadas del organismo y prevenir el estreñimiento. Además, puede reducir las probabilidades de padecer cáncer de colon.
- Regula el colesterol y azúcar en sangre: A diferencia de la fibra insoluble, la soluble reduce los niveles elevados de colesterol, triglicéridos y azúcar en la sangre, controla el porcentaje de glucosa, y mejora el proceso de coagulación de sangre y presión arterial. También, son ricas en hierro y favorecen la producción de glóbulos rojos, por lo que sirven para tratar la anemia. Por ello, su consumo es recomendado en personas que sufren diabetes o enfermedades cardiovasculares.
- Gran aporte de antioxidantes: el consumo de arvejas, ricas en vitamina A y beta caroteno, ayuda a proteger la retina y previene enfermedades de la vista como cataratas. Además, combaten los radicales libres que dañan las células previniendo enfermedades degenerativos o el envejecimiento prematuro
- Promueve la piel saludable: contiene betacaroteno y vitamina A cuya función es beneficiar la piel, el cabello y la uñas.
- Produce sensación de saciedad: el consumo de arvejas es aconsejable para estar satisfechos y es positivo para la pérdida de peso.