Preparar el caramelo para el flan es una de las etapas clave en la elaboración de este postre clásico. Aunque parece una tarea sencilla, hay ciertos pasos y precauciones que deben seguirse cuidadosamente para lograr un resultado perfecto. Paulina Cocina ofrece una receta clara y precisa para preparar este caramelo en casa, y aquí se explica cómo hacerlo, paso a paso.
Ingredientes esenciales para el caramelo
Para elaborar un buen caramelo para el flan, se necesitan dos ingredientes básicos: azúcar y agua. La proporción recomendada es de una medida de azúcar (por ejemplo, un vaso) y media medida de agua (medio vaso, si se utiliza el mismo vaso como referencia). Estos ingredientes, aunque simples, requieren de una técnica adecuada para lograr el punto justo del caramelo, que debe ser líquido y homogéneo.
El paso a paso del caramelo para el flan
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Colocar el azúcar en una olla de fondo grueso a fuego medio. Es importante elegir una olla adecuada, ya que el azúcar tiende a calentarse rápidamente y podría quemarse en recipientes de fondo fino.
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En una olla aparte, poner el agua a hervir. Este paso es crucial para que el proceso sea fluido más adelante.
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Mientras el agua hierve, comenzar a revolver el azúcar en la olla. A medida que el azúcar se calienta, comenzará a derretirse y caramelizarse. Aquí no se utiliza agua junto con el azúcar al principio, por lo que no es necesario preocuparse por la cristalización.
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Continuar revolviendo el azúcar hasta que se derrita completamente. Es fundamental asegurarse de que no queden gránulos de azúcar sin disolver, ya que esto podría afectar la textura del caramelo. El objetivo es obtener una mezcla completamente líquida y uniforme.
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Una vez que el azúcar esté bien caramelizado y líquido, llega el momento clave de la receta. Con el azúcar bien caliente, añadir el agua hirviendo de una sola vez. Este paso puede ser peligroso, ya que la mezcla reaccionará de inmediato al contacto con el agua hirviendo, produciendo vapor y burbujas.
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Apagar el fuego inmediatamente después de agregar el agua hirviendo y continuar revolviendo el caramelo para que los dos ingredientes se integren por completo. Esta acción permitirá obtener una textura perfecta.
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Pasar el caramelo a un bol, jarra o frasco y dejar enfriar. Al enfriarse, el caramelo tomará una consistencia más espesa, ideal para verter sobre el flan antes de desmoldarlo.
Precauciones importantes al hacer caramelo
Hacer caramelo para el flan puede parecer sencillo, pero es fundamental seguir ciertas precauciones para evitar accidentes. Dado que se trabaja con azúcar a temperaturas muy altas, se recomienda no tener niños cerca durante la preparación y, además, mantener el rostro alejado de la olla cuando se agregue el agua hirviendo, ya que el vapor puede causar quemaduras.
Otra recomendación importante es no dejar el caramelo solo en la hornalla en ningún momento, ya que el azúcar puede quemarse en cuestión de segundos. Además, siempre debe añadirse agua hirviendo sobre el caramelo y nunca agua fría o tibia, ya que la diferencia de temperatura podría generar una reacción peligrosa.
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