El 2 de febrero de 2002, Máxima Zorreguieta y el entonces Príncipe Guillermo contrajeron matrimonio, dando inicio a una nueva etapa en sus vidas. Máxima, oriunda de Buenos Aires, se convirtió en la primera argentina en formar parte de la realeza. Sin embargo, ¿alguna vez soñó con esto?
Máxima Zorreguieta nació en Buenos Aires el 17 de mayo de 1971 y creció en el elegante barrio de Recoleta. Su infancia transcurrió en un departamento de 120 metros cuadrados. Estudió en el exclusivo Colegio Northlands y siempre se destacó por su buen nivel académico. Sin embargo, no estuvo exenta de las presiones relacionadas con su apariencia física, ya que su madre controlaba sus comidas y le imponía dietas para que bajara de peso.
Cómo se conocieron Máxima y Guillermo
En su juventud, Máxima se destacó en la Universidad Católica Argentina, donde estudió Economía. Además, trabajó en diversas empresas financieras tanto en Argentina como en el extranjero. Fue en una fiesta en España donde conoció al entonces principe de Países Bajos Guillermo Alejandro, quien quedó encantado con su espontaneidad y su encantadora sonrisa. Después de un tiempo de noviazgo, la pareja se comprometió en 2001 y contrajo matrimonio el 2 de febrero de 2002.
Máxima Zorreguieta se convirtió en reina de los Países Bajos el 30 de abril de 2013, tras la abdicación de la reina Beatriz. La ceremonia de entronización fue todo un acontecimiento, con la presencia de representantes de diversas casas reales y miles de neerlandeses siguiendo la ceremonia en la plaza Dam de Ámsterdam.
La pareja real tiene tres hijas: Amalia, Alexia y Ariane. Amalia, nacida el 7 de diciembre de 2003, recibió el título oficial de Princesa de Orange al ascender al trono su padre. Alexia, nacida el 26 de junio de 2005, también ostenta los títulos de princesa de los Países Bajos y princesa de Orange-Nassau. Por último, Ariane, nacida el 10 de abril de 2007, completa la familia real.
No va a ligar nada: el contrato que firmó Máxima Zorreguieta antes de casarse con el Príncipe Guillermo
Máxima Zorreguieta y el Príncipe Guillermo son una de las parejas más consolidadas del mundo de la realeza. Previo a contraer matrimonio en 2022, la pareja firmó un acuerdo muy claro en torno a su matrimonio. Si bien hay muchas reglas inamovibles, en el caso de la pareja aceptaron estas imposiciones, sabiendo que son parte de una gran tradición. A través del libro "Máxima, una historia real", escrito por los periodistas Soledad Ferrari y Gonzalo Álvarez Guerrero, se conocieron algunos detalles de la vida conyugal de los reyes de Holanda y las cláusulas en torno a un posible divorcio.
Según se pudo saber, la reina de Países Bajos tuvo que firmar un acuerdo prenupcial cuando contrajo matrimonio de Guillermo Alejandro y el mismo indica que no existen los bienes conyugales en el caso de que se divorcien. Además, sus hijos deberán permanecer en el seno del Palacio. Entonces, si Máxima Zorreguieta se divorciara, recibiría de parte de la Corona del país europeo 890.000 euros anuales, pero perdería sus bienes y la posibilidad de vivir con sus hijos, tal como lo aceptó al momento de casarse con el rey.