Soledad Pastorutti es una cantante argentina que en sus casi treinta años de trayectoria demostró su versatilidad, entre toras cosas, a la hora de conducir programas de televisión. En un reciente descargo, la voz de Adonde Vayas recordó su paso como presentadora de La Peña de Morfi y habló de su reacción al enterarse de la enfermedad de Gerardo Rozín.
La artista oriunda de Arequito fue parte de la última emisión de La Peña de Morfi, ciclo en el que la homenajearon por su cumpleaños número 44 con invitados como Juan Carlos Baglietto y Ariel Pucheta. En el programa de streaming de Telefe, Soledad se refirió a su vínculo con el programa dominical y aludió a la etapa en que ofició de conductora.
"Me trae muchos recuerdos. Recién le decía Euge, imagínate cuando yo vine a La Peña, como conductora, me llamó Gerardo y ya me había contado en ese momento la situación”, reveló la cantante ante la consulta de una de las conductoras. Y sumó: “Entonces es como era una de las pocas que sabía todo lo que ocurría y estaba ahí apoyando en un momento difícil. Entonces me remueve muchos sentimientos, mucho cariño por todos los compañeros y bueno, muchos domingos sin dormir. Me sentí, recordé eso. Yo me venía de Arequito y allá salía como a las 4 de la mañana para estar acá. Fue muy lindo. Es lindo, es como una gran familia La Peña, que acompaña a otra gran familia todos los domingos".
Cabe recordar que Gerardo Rozín perdió su vida en marzo del 2022 tras varios meses de luchar contra un tumor cerebral. La Sole fue un pilar fundamental para la continuidad del programa en su momento, ya que ocupó el lugar de conductora principal y Jésica Cirio continuó como co-conductora.
La emoción de La Sole en Cosquín
"A aquella nena de 15 años que volvió consagrada a Arequito le diría 'el loco de tu viejo no estaba tan loco'. Porque yo en ese momento no tenía idea de lo que era esforzarse, de lo que era una carrera artística. Yo me di cuenta de que este era el camino correcto y decidí seguir con mi carrera artística como diez años después de ese momento. Al principio fue una idea de mi viejo, es un tipo muy especial y algún día deseo que alguien pueda contar toda la historia con todos los detalles porque realmente ha sido de esos papás que todo el mundo quiere tener, al igual que mi mamá. Perdón la emoción", soltó Pastorutti entre lágrimas. Y sumó: "Él no sabía si llagaba a fin de mes pero siempre fue muy alegre. Yo le debo a mis viejos, a mis abuelos y a toda mi familia lo que soy. Natalia y yo siempre fuimos iguales en casa, nadie es más que nadie. Cada vez estoy más convencida de que lo importante está ahí: en los amigos, en la familia, en los afectos".
La emoción de Soledad Pastorutti en el cumpleaños de su hija mayor
"Es posible que ese deseo responda a un mandato familiar, es posible que haya querido repetir la historia, quizás… no lo sé, no me importa. Lo único que puedo decir es que sin dudas es lo mejor que me pasó en la vida! Ser mamá no se aprende en ningún lugar, es el arte de multiplicar las horas y el amor. Es conocer el miedo verdadero y nuestra fortaleza real. Es la culpa, la impotencia, la sabiduría , el aprendizaje constante. Es quitarse el velo de los ojos. Transitar cada día con la mayor intensidad posible. Es vivir y amar sin límites!", escribió la Sole en redes.