Fede Bal visitó Los Mammones este viernes y, ya desde el comienzo anunció que hablaría sobre el escándalo surgido a raíz del audio que le envió a El Polaco sobre “la pileta calentita”, aunque lo haría por última vez. Tras semejante “venta”, el actor comenzó a relatar cómo fue la fiesta hasta que Gabriel Schultz lo detuvo aduciendo que “nadie le cree”.
“Quiero decir que cuando llegue el momento de hablar de El Polaco, va a ser la última vez que lo hable, pero voy a hablar todo”, aseguró Bal y captó la atención de Jey Mammon.
“Invité al Polaco a una fiesta y le dije ‘la pileta está caliente’ y ‘vienen amigas’. Se hizo todo un revuelo”, agregó más tarde para simplificar la situación, y ante la protesta de Silvina Escudero, que lo tenía entre ceja y ceja. “No pasó absolutamente nada. Puse la pileta caliente. Tengo una pileta muy linda y una casa en la que se puede estar al aire libre e invité a un determinado grupo de gente, que no éramos 50 personas. Hice un asadito y tomamos champagne, pero no corrimos desnudos”, llegó a decir el joven, antes de ser interrumpido.
En ese momento tomó la palabra Gabriel Schultz, quien frenó en seco la historia de Bal y sentenció: “Federico, no te está creyendo nadie en este momento. Ni una persona te está creyendo”, lanzó, ante la risa de Jey Mammon y obligando al joven a cambiar de tema.
Fede Bal se confesó en PH Podemos Hablar
En PH Podemos Hablar, el programa conducido por Andy Kusnetsoff los sábados a la noche por Telefe, los invitados del mundo del espectáculo, la política y el deporte suelen abrirse a confesiones de su vida privada. Esta vez, en la sección frente a frente del ciclo, la periodista Agustina Kampfer habló con el hijo de Carmen Barbieri, Fede Bal y lo invitó a compartir un detalle muy particular de su vida sentimental y la respuesta del mediático fue muy curiosa.
"¿Alguna vez te sentiste realmente en calma en los brazos de una mujer?", preguntó Agustina Kampfer a través de un vidrio que simula ser un espejo entre un invitado y otro y que ya acostumbró a los televidentes a encuentros inesperados entre figuras. "No voy a decir quién porque la conocen, pero me sentí muy en calma, muy feliz", respondió Bal.