La actriz Inés Moreno, de gran actividad en el cine, la televisión y el teatro entre las décadas de 1950 y 1980, falleció este domingo en Buenos Aires a los 88 años, confirmó a la prensa su hija Andrea Barbieri, aunque no especificó las causas del deceso.
Dueña de una fotogenia auténtica, talentosa y destacada por sus encantos personales que la llevaron a realizar papeles de importancia en el género romántico y en la comedia, su verdadero nombre era Dora Esilda Moreno, había nacido en la ciudad de Buenos Aires en 1932, debutó en el cine en 1947 y en las últimas dos décadas estuvo alejada de los focos.
Su belleza fue reflejada en las tapas de importantes revistas de la farándula, como Radiolandia, Antena y TV Guía, donde se seguían los detalles de su carrera así como su vida privada, en la que estuvo casada con el actor Juan Carlos Barbieri -padre de Andrea- entre 1957 y 1965, y más tarde con el periodista Lucho Avilés.
Su trabajo en el cine
A los 18 debutó en el cine con “La doctora Castañuelas”, de Luis José Moglia Barth, junto a figuras famosas de la época como el galán Roberto Airaldi, el bailarín Alfredo Alaria, la española María Antinea y el comediante Augusto Codecá.
A ese título siguieron “Escándalo nocturno” (1951), con José Cibrián y dirección de Juan Carlos Thorry, “Detrás de un largo muro” (1958), de Lucas Demare, con Lautaro Murúa, “Hay que bañar al nene” (1958), con Juan José Míguez, e “Isla brava” (1958), de Mario Soficci, con Elsa Daniel y Alberto Argibay.
Su paso por la TV
En 1957 debutó en el viejo Canal 7 en el ciclo “Cuentos para mayores”, actividad que le fue muy propicia posteriormente con “Obras maestras del terror”, creado por Narciso Ibáñez Menta, “Ocho estrellas en busca del amor”, “El monstruo no ha muerto” -también de Ibáñez Menta, quien personificaba a Adolfo Hitler- y “Laura mía”, en 1981.
Sus apariciones en TV sumaron “Yolanda Luján”, con Víctor Laplace e Irma Córdoba, “El hombre que amo”, con Germán Kraus y Mario Alarcón, “La cuñada”, con Ana María Campoy, Claudia Cárpena, y su último trabajo, “Chiquilina mía”, en 1991, con Daniel Fanego y Gustavo Garzón.
Sobre las tablas
En teatro participó en las obras “Hay que bañar al nene” (1953), de Abel Santa Cruz, con Juan Carlos Torry y Analía Gadé, “De noche también se duerme” (1954), también de Santa Cruz, con Julia Sandoval, Esteban Serrador y Osvaldo Terranova, “Escalera a dos puntas”, con Ángel Magña y Nelly Panizza, dirigida por Antonio Cunill Cabanellas, y “Romeo, Julieta y el tango”, con Polo Cortés, Julio De Grazia y Susana Rinaldi.
Otras de sus actuaciones en las tablas fueron en “Amorina” (1958), con la compañía de Tita Merello, “La leyenda de Juan Moreira” (1959), con Francisco Petrone y José María Langlais, y “Aprobado en castidad” (1960), de Luis Peñafiel, seudónimo de Narciso Ibáñez Serrador, junto a Pepita Serrador.