El diario La Nación se sumó a la campaña para desprestigiar la vacuna rusa Sputnik V al utilizar el testimonio de un ignoto periodista quien declaró que no se la pondría aunque luego expresó que lo haría si fuera población de riesgo.
Iaenzen Polimata -que no está especializado en inmunología- ni siquiera cuestiona la vacuna rusa, sino que pone en duda todas las medicinas inyectables al decir que no cuentan con el tiempo prudencial para ser utilizadas. Sin embargo, La Nación enfoca su nota para desprestigiar a la Sputnik V, la vacuna que se espera que sea la primera en llegar a la Argentina.
"No estoy hablando solo de la vacuna rusa. No hay comprobabilidad a largo plazo, hay comprobación a corto plazo. Las vacunas por lo general llevan de dos años a diez años a desarrollarse", explicó el periodista. El diario La Nación solo recortó en su título que "no se pondría la vacuna rusa" y no hizo mención a que el periodista hablaba de todas las vacunas y no sólo la Sputnik V.
El medio de derecha busca contribuir al ataque de occidente contra la vacuna rusa al reproducir datos parciales y en muchos casos falsos sobre la Sputnik V.
En la entrevista en Intratables, el periodista sin citar una fuente que fundamentara su información manifestó: "hay mucho riesgo de efectos colaterales, de reacciones alérgicas, de algún problema cancerígeno (SIC) más adelante. Entonces la gente que no está en riesgo prefiere esperar un poco para dársela".
Luego Polimata dijo que no se daría ninguna vacuna contra el coronavirus, pero luego afirmó que si tuviera alguna patología previa o fuera una persona de riesgo por su edad se la colocaría. "Si tuviera una patología preexistente me la pondría ahora porque creo que ahí minimizaría el riesgo", analizó el joven.
El periodista desmintió una nota que afirmaba que hay pocas personas que están acudiendo a los centros de salud rusos a colocarse la vacuna. "Hay muchos voluntarios, no es que no están yendo", afirmó.
Polimata además enfatizó en la nota que los primeros que deberían vacunarse son el personal de salud y el grupo de riesgo. "Creo que eso minimizaría el riesgo", sostuvo. Al final de la nota reconoció que en el mundo "hay una gran desinformación".
En Rusia, la vacunación contra el coronavirus no es obligatoria, sino que al igual que en la Argentina es voluntaria. Las campañas mediáticas que cuestionan el efecto de las medicinas perjudican a la sociedad debido a que generan desconfianza y pueden conducir a reducir los voluntarios. El efecto causará que haya menos personas inmunes al virus, generando una mayor circulación del Covid- 19 y un aumento en el número de muertes que son evitables.