Hace poco, la Cámara de Energía Oscura del Observatorio Cerro Tololo, en Chile, capturó una increíble imagen desde el espacio. Se trata de una constelación ubicada a 1.300 años luz de la Tierra, en la constelación de Puppis. Esta asombrosa imagen muestra cómo una mano fantasmal emerge del medio interestelar y se extiende hacia el cosmos.
NASA y el programa NOIRLab colaboraron para obtener esta imagen. Según los científicos, esta constelación, conocida como CG 4, es uno de los tantos cúmulos cometarios presentes en nuestra galaxia, la Vía Láctea. Su forma turbia y ominosa ha hecho que también sea apodada como "la mano de Dios". Aunque los astrónomos aún debaten sobre su formación, estos cúmulos cometarios son estructuras compuestas por gas denso y polvo cósmico rodeados de material ionizado y caliente.
La imagen captada muestra claramente las características que clasifican a CG 4 como un glóbulo cometario. Su cabeza polvorienta, con un diámetro de 1,5 años luz, y su cola larga y tenue, de aproximadamente ocho años luz de longitud, lo convierten en un pequeño glóbulo de Bok, una característica común en este tipo de objetos.
Hasta hace poco, estos glóbulos cometarios eran muy difíciles de detectar debido a su escasa visibilidad. Sin embargo, gracias a la Cámara de Energía Oscura y su filtro de Hidrógeno-alfa, se logró captar el resplandor rojo del hidrógeno ionizado presente en la cabeza de CG 4 y en su borde exterior. Esta luz es el resultado de la estimulación del hidrógeno luego de ser bombardeado por la radiación de estrellas masivas y cercanas.
Aunque la radiación intensa generada por estas estrellas está destruyendo gradualmente la cabeza del glóbulo y borrando las partículas que dispersan la luz estelar, la polvorienta nube de CG 4 aún contiene suficiente gas para alimentar la formación de varias estrellas nuevas del tamaño del Sol.
Además, se observó que la mayoría de los glóbulos cometarios, incluyendo a CG 4, se encuentran dentro de una gigantesca mancha de gas incandescente llamada Nebulosa Gum, que alberga al menos 31 glóbulos cometarios. Se cree que esta nebulosa es en realidad los remanentes de una supernova que ocurrió hace aproximadamente un millón de años.
Aunque aún no se conoce con certeza cómo adquieren su forma característica estos glóbulos cometarios, los astrónomos tienen dos teorías principales al respecto. La primera plantea que podrían ser nebulosas esféricas que fueron afectadas por una explosión de supernova cercana. La segunda teoría sugiere que los glóbulos cometarios están formados por la combinación de vientos estelares y presión de radiación provenientes de estrellas masivas cercanas. En particular, los glóbulos cometarios dentro de la Nebulosa Gum parecen tener colas que se alejan del centro de la nebulosa, donde se encuentran el Remanente de Supernova Vela y el Púlsar de Vela.
A pesar de lo que parece en la imagen, CG 4 no está a punto de devorar la galaxia espiral de canto ESO 257-19 (PGC 21338). En realidad, esta galaxia se encuentra a más de cien millones de años luz más allá de CG 4 y solo parecen estar cerca debido a una alineación fortuita.
La sorprendente propuesta de la NASA para llegar a Marte en dos meses
La NASA lleva a cabo un emocionante proyecto en colaboración con una empresa de desarrollo tecnológico para revolucionar los viajes espaciales y acortar el tiempo de llegada a Marte. Según la agencia espacial, este nuevo sistema de propulsión podría llevar a los humanos al Planeta Rojo en tan solo dos meses, en comparación con los nueve que se demora en la actualidad.
El programa Conceptos Avanzados Innovadores (NIAC) de la NASA seleccionó seis proyectos prometedores para su financiamiento y desarrollo adicional. Estos incluyen un sistema de ferrocarril lunar, telescopios basados en fluidos y un cohete de plasma pulsado, entre otros. Estos avances podrían hacer posible un viaje más rápido y eficiente hacia Marte.
La compañía Howe Industries, con sede en Arizona, estuvo a cargo del desarrollo de este innovador sistema de propulsión. Su cohete de plasma pulsado utilizó la fisión nuclear para generar paquetes de plasma que impulsaron la nave espacial. Con este nuevo sistema, el cohete generó hasta 22.481 libras de fuerza (100.000 Newtons) con un impulso específico de 5.000 segundos, lo cual representa una notable eficiencia en el consumo de combustible.
La fisión nuclear para la propulsión espacial ha sido una idea recurrente, pero ahora la NASA desarrolló una nueva versión del cohete de plasma pulsado que es más pequeña, simple y accesible. La agencia espacial espera que su alto nivel de eficiencia permita completar las misiones tripuladas a Marte en solo dos meses, en lugar de los nueve meses actuales que se necesitan para llegar al Planeta Rojo.
Esto no solo acortaría significativamente el tiempo de viaje, sino que también reduciría la exposición de los astronautas a la radiación espacial y a la microgravedad, minimizando sus efectos en el cuerpo humano. Además de su velocidad, el cohete de plasma pulsado también podría transportar naves espaciales más pesadas, lo que permitiría llevar a bordo sistemas de protección contra los rayos cósmicos galácticos.
La fase 2 del programa NIAC se enfocó en analizar la interacción de la nave espacial con el plasma, diseñar la nave y los sistemas necesarios, evaluar las capacidades de las boquillas magnéticas y determinar las trayectorias y beneficios de este novedoso sistema de propulsión.