"Miedo me da": Jujuy Jiménez filmó el momento en que era víctima de acoso callejero

La panelista de Informados de todo se grabó mientras esperaba que se alejara el hombre que la estaba persiguiendo.

07 de enero, 2021 | 15.02

Jujuy Jiménez vivió un angustiante momento en la calle cuando salía del canal y un hombre la persiguió. Nerviosa con la situación, la modelo decidió grabar una historia en su cuenta de Instagram y contar en vivo todo lo que iba ocurriendo, siendo víctima de acoso callejero.

“Perdón, pero hay un señor a mi derecha que me está acosando”, comenzó narrando Sofía. “No, no, no es que me está acosando, pero me está persiguiendo. No sé si mostrarlo o no. Miedo me da. ¡Ay, que se vaya!”. Y mientras le hablaba a la cámara de su celular observaba de reojo al hombre, que continuaba espiándola. “Ahí se fue”, dijo por fin, aliviada.

En otra historia, Sofía se explayó: “Recién me reía pero en realidad, claramente no es gracioso. Salgo del programa y este tipo me ve, me dice no sé qué cosa, me grita por la ventana, frena, da la vuelta; yo venía caminando, no sé qué, y veo que me aparece acá, mientras grababa la historia anterior estaba el tipo ahí”.

“Me río por los nervios pero no da, no está bueno. ¿Qué onda, maestro? Un tipo grande encima...”, dijo Sofía, aún un tanto preocupada por lo que había sufrido a la salida de la emisora ubicada en el barrio de Palermo.

Acoso callejero en la Ciudad de Buenos Aires

Las estadísticas de la Ciudad de Buenos Aires sobre el acoso callejero, como precisa Clara Muzzio, ministra de Espacio Público e Higiene Urbana del Gobierno porteño, son preocupantes: todas las mujeres que residen en Capital aseguran haber sentido acoso en el espacio público en algún momento de su vida. Y siete de cada 10 manifiesta haber recibido comentarios de un desconocido sobre su apariencia, mientras que el 74% contó que cruzó de vereda por temor a lo que pudiera decirle un hombre, o un grupo de hombres.

“De todos los tipos de violencia aleatoria que soportan las mujeres, independientemente de los tiempos, la educación, la edad o la clase social, la del acoso callejero es la más naturalizada, invisibilizada y socialmente ‘tolerada’. Es una práctica tan sutil como agresiva que suele callarse y dejarse pasar, pero que provoca graves consecuencias en quienes la padecen”, sostiene Muzzio.