Los discos duros sólidos (SSD) se han convertido en una opción popular para almacenar datos en computadoras de escritorio, portátiles, servidores y estaciones de trabajo. Al no tener partes móviles, los SSD son más confiables y resistentes que los discos duros tradicionales. Si bien los SSD son duraderos, es importante tener en cuenta algunas prácticas recomendadas para prolongar su vida útil.
¿Cómo cuidar tu disco sólido?
En primer lugar, es importante apagar la computadora de manera correcta y no forzar el apagado. De esta manera, se evita cualquier posible daño a los componentes del SSD. Al adquirir un nuevo SSD, se recomienda elegir un modelo reciente para obtener las últimas tecnologías y características de seguridad. Además, es importante hacer copias de seguridad periódicas de los datos almacenados en el SSD para evitar la pérdida de información en caso de fallas o errores del sistema.
Otro consejo importante es revisar que se realicen las actualizaciones del BIOS relacionadas con el almacenamiento, ya que esto puede mejorar el rendimiento y la compatibilidad con otros componentes del sistema.
Para facilitar este proceso, algunos fabricantes ofrecen herramientas de software para el cuidado de los SSD. Por ejemplo, Kingston SSD Manager (KSM) es una herramienta gratuita y fácil de usar que permite monitorear la salud y el uso del espacio del SSD, ver datos de identificación de la unidad, actualizar el firmware y eliminar datos de forma segura.
Para instalar Kingston SSD Manager (KSM), se puede seguir el proceso de descarga e instalación proporcionado por el fabricante. Una vez que el software está instalado, se pueden configurar las opciones de monitoreo y actualización de firmware según las necesidades del usuario.
Es una buena práctica comprobar periódicamente el estado del SSD para detectar posibles problemas que puedan sugerir que se acerca el final de su vida útil. Si el estado de la unidad ha disminuido drásticamente durante su vida útil, considera actualizarla a una unidad de alto rendimiento.
Otros consejos para cuidar tu disco sólido
Hay otra serie de acciones que podés llevar a cabo para cuidar aún más tu disco sólido y toda la información que lleva. En primer lugar, evitá someter tu SSD a temperaturas extremas y asegurate de que tu unidad no esté expuesta a temperaturas extremas. Los discos sólidos pueden verse afectados por temperaturas muy altas o muy bajas, por lo que es importante mantenerlos en un ambiente con una temperatura adecuada.
Evitá también llenar tu unidad al máximo de su capacidad, ya que esto puede disminuir su rendimiento y su vida útil. Es recomendable dejar un poco de espacio libre para que el SSD pueda trabajar con mayor eficiencia.
Por último, los cortes de luz pueden dañar tu disco sólido, por lo que es recomendable utilizar un sistema de alimentación eléctrica con regulador de voltaje para evitar problemas de este tipo.