La Difunta Correa es una de las Santas Populares más importante de Argentina y desde su trágica muerte es venerada por miles y miles de fieles. Tal es así que en las últimas semanas el plantel de San Martín de San Juan fue a agradecerle por el ascenso a primera.
Su mito no sólo quedó en las ofrendas a su altar sino que quedó inmortalizada en una película que cuenta su vida, su muerte y su elevación a santa pagana tras una importante investigación que realizó su director.
"Difunta Correa: la verdadera historia", es una película estrenada en 2018 dirigida por el realizador cinematográfico sanjuanino Pepe de la Colina y protagonizada por Marina Zeghaib.
El film que se grabó en San Juan, es una mezcla de ficción y documental y su director la describió cómo "la historia de Deolinda Correa y su travesía con su hijo a cuesta en busca de su marido hecho prisionero". También señaló que dan cuenta "del crecimiento del santuario que en la actualidad es un lugar que recibe a 3 millones de promesantes al año".
El director, ya fallecido, contó que realizó un trabajo de investigación y que la Difunta Correa es un personaje que lo interpelaba desde chico ya que visitaba su altar con su madre y vio crecer el lugar desde una pequeña capilla al gran santuario que hay en la actualidad.
Esta película dura 66 minutos y se puede ver de manera gratuita en Youtube. Allí también se pueden ver otros trabajos de Pepe de la Colina cómo una cinta en honor a Domingo Faustino Sarmiento.
¿Quién fue la Difunta Correa?
Deolinda Correa, más conocida como la Difunta Correa, es una figura que se ha ganado un lugar en la historia y la religiosidad popular de Argentina. Nacida durante las Guerras de Independencia, Deolinda vivió en una época de conflictos y agitación. Su marido, Clemente Bustos, fue reclutado forzosamente durante las guerras civiles, y ella, decidida a seguirlo, emprendió un viaje llevando en brazos a su hijo pequeño.
Desafortunadamente, Deolinda murió de deshidratación a mitad de camino, pero cuando arrieros la encontraron unos arrieros, su hijo seguía vivo, alimentándose de su pecho. Este hecho se considera el primer milagro atribuido a ella y marcó el inicio de su devoción. La historia de la Difunta Correa es una mezcla de leyenda y fe, de sacrificio y milagros. Los devotos creen que ella realiza milagros e intercede por los vivos, y es por eso que su santuario en Vallecito, San Juan, se ha convertido en un lugar de peregrinación masiva.