Brasil se posicionó este verano como uno de los destinos más elegidos por los argentinos. La situación alrededor del cambio y los precios más accesibles hicieron que miles de turistas crucen a vacacionar al país vecino.
Y si bien los clásicos destinos -como Florianópolis, Río de Janeiro y Buzios- fueron los más elegidos, existen una serie de playas “secretas” que no podés dejar de conocer si vas a tierras brasileñas. Acá, 5 de ellas.
Estas son las 5 playas SECRETAS de Brasil que no te podés perder
Las playas de Brasil cuentan con la característica distintiva de sus aguas cálidas y turquesas. Paisajes con morros, la arena blanca y unos amaneceres y atardeceres “de película” las vuelven algunos de los destinos más atractivos del sur del continente.
Y más allá de los clásicos de siempre, existen otros lugares “poco conocidos” que son una tentación que no te podés perder. El primero de ellos es Japaratinga, ubicado en el estado de Alagoas, entre Maragogi y Porto de Pedras.
Se trata de una antigua colonia de pescadores que tiene playas de aguas tranquilas y arena blanca, casi siempre desiertas, lo que permite una experiencia de relajación completa. Y por su cercanía a los arrecifes de coral y por sus piscinas naturales, se puede ir en lancha o catamarán para zambullirse y hacer snorkel para avistar los distintos peces de la zona.
Otro de los destinos de estas características es Antunes, ubicado en el mismo estado. Este “Caribe brasileño”, como se lo conoce, ofrece a sus visitantes piscinas naturales producto de la baja marea. Es posible llegar caminando por los bancos de arena, pero también haciendo kayak o stand up paddle. Sus playas de arena fina, palmeras ondeando al viento y agua siempre turquesa la vuelven un paraíso.
São Miguel do Gostoso, en Río Grande do Norte, es un destino perfecto para otro tipo de turismo. Es que este balneario se torna un lugar ideal para desconectar y relajarse. Con vientos constantes, este pequeño pueblo de pescadores tiene tan solo 10.000 habitantes, calles de tierra y una sola iglesia. Pero los detalles son la búsqueda de la tranquilidad: por ejemplo, no permite la música a volumen alto en los bares.
Un secreto de Brasil es sin dudas Ilhabela, ubicado en São Paulo. Este pequeño paraíso está lleno de playas y cascadas escondidas, aunque también se destaca una gran cantidad de morros y vegetación, dada su riqueza biológica. Más del 80% de la isla es considerada reserva natural, y es común ver tucanes y monos saltando de rama en rama.
Finalmente, no se puede dejar de nombrar a Barra Grande, en el estado de Bahía. Este destino es un pueblo pesquero que tiene una combinación interesante, ya que, de un lado, ofrece una playa recta, de arena clara y aguas templadas; y del otro, la Lagoa do Cassange, un lago de agua dulce rodeado de vegetación exuberante.