Calles sin autos, paradas de colectivo sin gente, bancos y comercios cerrados, son algunas de las imágenes que dan cuenta del acatamiento a la medida de fuerza convocada por la Confederación General del Trabajo (CGT) para manifestar el rechazo a las medidas económicas, políticas y sociales del gobierno de Javier Milei. "La contundencia del paro que vimos a lo largo y a lo ancho del país demuestra que el Gobierno tiene que tomar nota", afirmó el cosecretario General de la mayor central sindical argentina, Héctor Daer.
Mientras se debate la nueva ley ómnibus en el Senado y se espera el tratamiento sobre la legalidad del DNU 70/23 en Diputados, en la sede de Azopardo, en Ciudad de Buenos Aires, Daer afirmó: "Nosotros tomamos nota del acompañamiento y la gestión de Milei de lo que significa la expresión de los trabajadores para reconfigurar su política de ajuste, que nos está llevando a extremos a muchos sectores de la ciudadanía que difícilmente se podrían recuperar si estas políticas siguen adelante".
El paro tuvo como consignas "Milei pará la mano, la patria no se vende, en defensa de los derechos laborales, sociales, previsionales y del modelo sindical, por el salario digno, por empleo con derechos laborales, paro nacional", en pos de las distintas políticas impulsadas desde el 10 de diciembre pasado que impactaron de lleno en el bolsillo de las y los trabajadores.
En ese camino, durante la conferencia de prensa, las y los dirigentes anticiparon que por la respuesta de esta jornada, habrá una movilización cuando se trate la Ley Bases en el Senado, que aún no consiguió dictamen. “El plan de lucha ya está lanzado. Y cada medida es cada vez más masiva”, dijo Pablo Moyano.
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