La CGT activa un paro que busca ser una gran muestra de rechazo al ajuste

Desde la 0 hora comenzó el segundo paro general de la CGT contra el gobierno de Javier Milei y sus políticas de ajuste. A la huelga se plegaron los gremios del transporte, por lo que la adhesión promete ser contundente. "Es una jornada de resistencia y reclamo, por las necesidades que deben ser atendidas y reparadas", explicaron las centrales sindicales en un documento.

09 de mayo, 2024 | 00.03

A partir de las 0 de este jueves arrancó el segundo paro general convocado por la CGT -al que adhirieron las dos CTA- contra las políticas de Javier Milei, que desde el inicio de su mandato puso en marcha una serie de medidas contrarias a la producción nacional y la generación de empleo. La caída de la actividad medida por el Indec conocida este miércoles mostró en marzo un nuevo récord negativo, evidencia de que la mentada recuperación económica por ahora sólo está en la imaginación de los funcionarios. Además, primero con el DNU 70/23 y ahora con el proyecto de ley Bases, el Ejecutivo apuntó en estos meses a limitar los derechos laborales y debilitar a las organizaciones sindicales. Por todo ello, la huelga de hoy promete convertirse en una nueva gran muestra de rechazo a la gestión libertaria, continuidad de la gigantesca movilización universitaria de hace 15 días.

"Es una jornada de resistencia y reclamo, por las necesidades que deben ser atendidas y reparadas. El movimiento sindical de la Argentina en defensa de la democracia, los derechos laborales y el salario digno", concluyó el documento con el que las tres centrales sindicales convocaron al paro. En un extenso repaso, las centrales plantearon allí la necesidad de hacer frente a "un ajuste brutal que sufren especialmente los sectores de menores ingresos, las clases medias asalariadas, jubilados y pensionados". Definieron a la gestión Milei como "un gobierno sin diálogo social, que sólo se vincula con los representantes de intereses amigos, que agrede y deshecha a los trabajadores y a sus organizaciones, menosprecia a jubilados y pensionados que no pueden esperar, se desentiende de la atención a los más vulnerables, discrimina a las y los hacedores de la economía popular".

Ante una oposición aturdida por un resultado electoral inesperado, la CGT tomó desde el inicio de la gestión la bandera del rechazo a las medidas de Milei. En buena medida como reacción a la reforma laboral incluida en el DNU 70 preparado por Federico Sturzenegger junto a los estudios juridicos de los principales grupos económicos. La CGT que encabezan Héctor Daer, Pablo Moyano y Carlos Acuña presentó un amparo judicial -avalado luego por la Cámara laboral- junto a las primeras protestas contra la ofensiva oficial. En los últimos días, la Casa Rosada cambió su postura respecto a la central y aceptó abrir una vía de diálogo durante una reunión de la que participaron el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, el ministro del Interior, Guillermo Francos, y el asesor presidencial Santiago Caputo.

Pero el gesto, tardío, no sirvió para frenar el plan de lucha ya resuelto por la central. Principalmente, porque el Ejecutivo continúa aún hoy con la estrategia de pisar las paritarias que considera demasiado elevadas y no las homologa. Por otro lado, si bien la reforma laboral incluida en la ley Bases se moderó respecto al DNU, continúa teniendo aspectos que la central considera lesivos para los derechos de los trabajadores y que favorecen la contratación de empleados en negro. Pablo Moyano subrayó que la iniciativa que ya tiene media sanción de Diputados y se está discutiendo en las comisiones en el Senado va en contra de los trabajadores. Explicó que el paro era "una forma de decirle a los senadores que no se puede llevar adelante y aprobar una ley que va en contra de los trabajadores los jubilados, contra los recursos naturales, contra las empresas del Estado".

La mesa de la central estuvo el martes reunida con los senadores de Unión por la Patria que le aseguraron que todos votarán en cotnra de la ley en general. Son 33 senadores, por lo que faltan otros cuatro para llegar a la mayoría. "A los del peronismo les tengo confianza. hay que ver qué se puede conseguir de los bloques que no pertenecen al peronismo", contó ayer Carlos Acuña en diálogo con El Destape Radio. Adelantó que también intentarán dialogar con los gobernadores, algunos de ellos con incidencia directa sobre los senadores. Acuña evaluó que un paro general contundente seguramente incidirá en la voluntad de los legisladores. El capítulo fiscal de la ley incluye la reimplantación del impuesto a las Ganancias a los trabajadores, cuya eliminación fue celebrada por la central el año pasado.

Pero así como la CGT mantuvo cierta iniciativa en la resistencia a las medidas de Milei, tuvo siempre a su lado a la CTA de los Trabajadores y a la CTA Autónoma que respaldaron activamente todas sus protestas. "Frente a un gobierno que solo beneficia a los ricos a costa de los sectores populares, entrega los recursos naturales y pretende eliminar los derechos de los trabajadores, mañana la CTA con todas sus organizaciones convoca al paro general", anunció el secretario general y diputado Hugo Yasky. La unidad en acción de las tres centrales es un dato relevante de estos meses. 

Una de las garantías de que el paro será contundente es la adhesión de los gremios del transporte. No habrá colectivos, subtes, ni trenes. Lo mismo ocurrirá con los aviones, tampoco habrá servicio de tareas en los aeropuertos. Por otro lado, también los bancos estarán cerrados. Esta postal comenzó a verse apenas se inició la jornada, a las 0 hora, cuando el tránsito ya comenzó a ser menor a lo habitual. A diferencia del anterior paro del 24 de enero, en esta ocasión el Gobierno buscó atemorizar y desalentar la huelga de todas las maneras a su alcance. Temprano, el vocero Manuel Adorni aseguró que se le descontará la jornada a los estatales que se pleguen a la medida. "No vas a tener ni quién te sirva café", le respondió el titular de ATE, Rodolfo Aguiar.

Adicto a las redes, el Presidente subió en su Instagram una foto con una remera con la leyenda "Yo no paro", el hashtag que buscarán instalar los libertarios en una jornada que se les presenta muy complicada. El segundo paro general en cinco meses, sólo el inicio de lo que puede seguir en caso de persistir con medidas que apuntan contra los derechos y los ingresos de trabajadores y jubilados, según anticipó la central obrera.