Los mosquitos son insectos que evolucionaron para localizar a sus presas con gran precisión. Diversos estudios científicos han buscado entender por qué algunas personas parecen ser más atractivas para los mosquitos que otras. Un estudio reciente, publicado en mayo de 2023, arrojó luz sobre las sustancias químicas presentes en el olor corporal humano que atraen a los mosquitos, ofreciendo nuevas perspectivas sobre este fenómeno.
Cómo los mosquitos encuentran a sus víctimas
Los mosquitos, aunque mayormente se alimentan de néctar, necesitan proteínas para la reproducción, las cuales obtienen de la sangre. En particular, las hembras buscan alimentarse de sangre para producir huevos. Esta necesidad biológica es lo que motiva a los mosquitos a buscar activamente a los humanos, quienes se convierten en sus principales objetivos debido a ciertas señales químicas emitidas por el cuerpo.
Los estudios sobre la atracción de los mosquitos
Un equipo de investigadores liderado por el Dr. Conor McMeniman, de la Universidad Johns Hopkins, llevó a cabo un experimento innovador en una instalación diseñada para replicar el hábitat natural de los mosquitos en África. El objetivo principal era entender cómo los mosquitos encuentran a los humanos. Este experimento se realizó en una instalación del tamaño de una pista de patinaje, donde se recogieron muestras de aire que contenían el aliento y el olor corporal de diferentes personas.
Las sustancias químicas responsables de la atracción
Los resultados del estudio revelaron que los mosquitos se sienten particularmente atraídos por los ácidos carboxílicos presentes en el olor corporal humano. Uno de estos ácidos, el ácido butírico, es conocido por su presencia en ciertos quesos de olor fuerte, como el Limburger. Estos ácidos son producidos por bacterias en la piel humana y, aunque no son perceptibles para las personas, actúan como una señal poderosa para los mosquitos.
Por otro lado, se descubrió que otra sustancia química, el eucaliptol, presente en ciertas plantas, tenía un efecto disuasorio en los mosquitos. Este hallazgo sugiere que la dieta de una persona podría influir en la cantidad de eucaliptol en su cuerpo y, por lo tanto, en su atractivo para los mosquitos.
Aunque aún no se encontró una solución definitiva para evitar las picaduras de mosquitos en situaciones cotidianas, el avance en la comprensión de los factores químicos que atraen a estos insectos representa un paso importante. Con más investigaciones, es probable que se desarrollen nuevos métodos para reducir la incidencia de enfermedades transmitidas por mosquitos y, al mismo tiempo, hacer que las reuniones al aire libre sean más agradables.