Los mosquitos no son solamente una molestia durante el verano, sino que también pueden seguir presentes en el otoño, afectando la higiene, contaminando alimentos, dañando plantas y haciendo las tareas diarias más desagradables.
Sin embargo, existen varias trampas caseras para mosquitos que resultan efectivas y fáciles de configurar, con elementos que probablemente ya tengas en casa. También aplica para moscas, así que podés matar "dos pájaros de un tiro", como dice el dicho popular.
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Trampa para mosquitos: vinagre de sidra de manzana
El vinagre de sidra de manzana es una excelente opción porque su olor atrae increíblemente a los mosquitos. Para preparar esta trampa, necesitarás:
- Media taza de vinagre de sidra de manzana.
- Una cucharada de azúcar.
- Unas gotas de jabón para platos.
- Un frasco o tazón.
- Papel film.
- Cinta adhesiva.
- Lápiz o birome.
Procedimiento
- Mezclar. Primero, hay que combinar el vinagre de la sidra de manzana, con el azúcar y las gotas de jabón para platos en el frasco o tazón. El azúcar y el vinagre atraerán a los mosquitos, mientras que el jabón para platos los atrapará.
- Cubrir el recipiente. Hay que cubrir el frasco o tazón con papel film, además de asegurarlo con cinta adhesiva.
- Hacer agujeros. Con un lápiz o birome, es necesario hacer varios agujeros pequeños en la envoltura de plástico. Los mosquitos entrarán por estos agujeros, pero no podrán escapar.
- Ubicación. Colocar la trampa en una zona con alta circulación de mosquitos para maximizar su efectividad.
Trampa para mosquitos: vino tinto
Al igual que con el vinagre de sidra de manzana, el vino tinto tiene un aroma irresistible para los mosquitos. Para hacer esta trampa, vas a necesitar:
- Vino tinto.
- Una gota de jabón para platos (o lavavajillas).
- Un recipiente (taza o frasco).
Procedimiento
- Mezclar. Hay que verter el vino tinto en el recipiente, agregándole una gota de jabón para platos. La función del jabón es romper la tensión superficial del líquido, haciendo que los mosquitos se hundan al contacto.
- Ubicación. Seguido de eso, hay que colocar la trampa en una zona frecuentada por mosquitos. Eso los atraerá para que, finalmente, el aroma del vino tinto los atrape en la solución.
Estas trampas son sencillas y usan elementos comunes del hogar. Por eso es importante revisar y renovar las soluciones regularmente para mantener su efectividad. Además, conviene colocar varias trampas en diferentes áreas de tu casa, para así cubrir más espacio y mejorar los resultados.
El hecho de implementar estas trampas caseras te ayudará a reducir la presencia de mosquitos, mejorando así la higiene de tu hogar y haciéndolo más cómodo y seguro.
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