Los perros nos acompañan en nuestro día a día y de alguna manera u otra se están comunicando todo el tiempo con nosotros para hacernos saber si necesitan algo y cómo se sienten. Cada gesto que realizan puede brindarnos pistas clave sobre su estado emocional y físico por lo que aprender a interpretar estas señales no solo fortalece el vínculo entre vos y tu mascota, sino que también asegura que reciban el cuidado y la atención que precisan.
A continuación, te contamos qué dicen los especialistas sobre seis de los gestos más comunes que podés observar en tu perro y qué significan.
1. Movimientos de cola
Una cola que se agita es una clara señal de alegría en los perros. Este movimiento suele ir acompañado de ojos brillantes y una expresión facial relajada que muchos describen como una especie de “sonrisa canina”. Sin embargo, no siempre el movimiento de la cola significa felicidad.
Si la cola se mueve rígidamente o de forma rápida y tensa, puede ser un indicador de nerviosismo o estrés. Por eso, es importante observar el contexto y los gestos complementarios del perro.
2. Postura encorvada y orejas caídas
Los perros también pueden experimentar tristeza, y la muestran a través de una postura encorvada, orejas caídas y movimientos lentos. En algunos casos, podés notar pérdida de apetito, aislamiento o somnolencia.
Si esta conducta persiste, podría tratarse de un problema emocional más profundo, como depresión. Ante cualquier duda, lo mejor es consultar con un veterinario o un especialista en comportamiento animal.
3. Temblores y cola entre las patas
El miedo es una emoción natural en los perros que les ayuda a protegerse de posibles amenazas. Se manifiesta con temblores, lomo erizado, rigidez corporal o una cola escondida entre las patas. Estas señales suelen aparecer en situaciones como tormentas, fuegos artificiales o la presencia de personas desconocidas.
En estos momentos, es fundamental transmitirles seguridad y mantener la calma para que el perro pueda superar la situación.
4. Jadeos excesivos y comportamientos repetitivos
El estrés puede afectar seriamente la salud de un perro, tanto a nivel físico como emocional. Según los expertos, algunos indicadores de tensión acumulada incluyen jadeos excesivos, hipersalivación y comportamientos repetitivos, como lamerse constantemente o excavar sin motivo aparente. Identificar y eliminar las causas del estrés es clave para prevenir problemas más graves.
5. Lamidos y contacto visual
Cuando un perro lame suavemente, busca contacto visual o se apoya en vos, está mostrando su cariño y confianza. Estos gestos son su forma de demostrar el vínculo especial que tienen con su dueño. Sin embargo, es importante respetar sus límites, ya que no todos los perros disfrutan de abrazos o toques bruscos.
6. Conductas hiperactivas
Si bien la alegría es una emoción positiva, puede transformarse en sobreexcitación si no se controla. Los perros excesivamente emocionados pueden mostrar comportamientos descontrolados, como saltar constantemente o ladrar sin motivo. Mantener un ambiente equilibrado y tranquilo es esencial para el bienestar de tu mascota.
Por qué es importante observar a tu perro
Comprender el lenguaje corporal de los perros mejora significativamente la relación que tenemos con ellos. Al prestar atención a estos gestos, podés identificar qué sienten y actuar en consecuencia, asegurándote de que estén felices, saludables y cómodos.
Si observás cambios preocupantes en el comportamiento de tu perro, no dudes en consultar con un veterinario o un especialista en comportamiento animal. Estos profesionales pueden ayudarte a identificar cualquier problema subyacente y brindarte las herramientas necesarias para mejorar la calidad de vida de tu mascota.