El caso que no termina. Madeleine McCann desapareció en Praia da Luz, Portugal, mientras sus padres disfrutaban de una cena en un restaurante cercano. Desde entonces Kate y Gerry McCann, sus padres, lideraron incansablemente una campaña mundial para encontrar a su hija, manteniendo viva la esperanza de su regreso.
En medio de esta tragedia, Amelie y Sean, los gemelos de Madeleine, ahora con 18 años, tuvieron que aprender a vivir con la ausencia de su hermana mayor. Siendo adultos, le prometieron a su madre que continuarán la búsqueda de Madeleine en el futuro. Mientras Amelie se prepara para ingresar a la universidad, Sean también está buscando su propio camino, aunque la pérdida de Madeleine sigue impactando en sus vidas diarias.
Cómo es el día a día Sean y Amelie desde la desaparición de Madeleine
Cada año, en el aniversario de la desaparición de Madeleine, la familia se reúne para eventos conmemorativos, renovando su compromiso de nunca renunciar a la búsqueda de Madeleine. Amelie y Sean estudiaron, fieles a la fe de sus padres, en una escuela católica en Loughborough, donde siempre mantienen una vacante reservada para Madeleine como símbolo de apoyo constante hacia la familia.
Durante la adolescencia, los gemelos prefirieron mantenerse alejados de la atención pública relacionada con la desaparición de su hermana y no dieron entrevistas a los medios. Según Kate, los gemelos "están siempre ocupados con actividades como triatlones y carreras de campo, aunque sienten profundamente la ausencia de Madeleine desde aquel día en 2007".
Sean, en particular, siempre expresó preocupaciones y deseos de encontrar al responsable de la desaparición de su hermana. A pesar de la dificultad de vivir bajo la sombra de esta tragedia, la familia McCann continúa enfrentando su realidad con esperanza y determinación, manteniendo viva la memoria y el deseo de encontrar a Madeleine.
La familia, emocionada con los homenajes
Kate y Gerry están conmovidos por el apoyo continuo de la gente que se reúne para respaldarlos, tanto de quienes estuvieron presentes desde hace años, como también de quienes asisten por primera vez. Después de dieciséis años sin saber el paradero de su hija, la incertidumbre persiste, pero siguen aferrados a la esperanza. Incluso recibir malas noticias proporcionaría algún tipo de cierre.
Durante la ceremonia conmemorativa del último 3 de mayo, los padres de Madeleine leyeron un comunicado expresando "su agradecimiento por el apoyo recibido y su esperanza de un avance en la investigación policial". Amelie, acompañada por su amiga Georgina, encendió una vela en honor a su hermana Maddie, marcando el cierre de la ceremonia. A pesar de esto, la búsqueda de Madeleine McCann continúa incansablemente.