Es, sin lugar a dudas, el máximo emblema del feminismo en Argentina. Se convirtió, además, en la imagen y símbolo de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito, fundada el 28 de mayo de 2005 durante el Encuentro Nacional de Mujeres realizado en la ciudad de Rosario. Verde, triangular, con el logo y el lema impresos de color blanco. Presente siempre en cada manifestación pública, en las calles o incluso en el transporte público, atado en la mochila de cada mujer y/o persona gestante. Con un color llamativo y también con la referencia establecida de Abuelas y Madres de Plaza de Mayo, las grandes y eternas luchadoras en la historia de nuestro país. Pintado en las paredes, colgado en los balcones, en el puño de cada una.
En un principio, la Campaña estuvo integrada por un total de 70 organizaciones en todo el país. Hoy, luego de 17 años de arduo trabajo por los derechos y las libertades de todas las mujeres del territorio argentino, incluye a más de 500 organizaciones a lo largo y ancho de la Argentina. Entre ellas aparecen personalidades vinculadas al movimiento de mujeres, organizaciones sociales, organismos de derechos humanos, organizaciones del ámbito académico, científico, sindicatos, agrupaciones estudiantiles y trabajadores de la salud. En cada una y cada uno, el uso del pañuelo no solo implica una identificación sino también una resistencia.
"El pañuelo en Argentina está asociado a la lucha por los derechos humanos, por las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo. A estas alturas, el pañuelo verde es un símbolo de lucha en los feminismos. Nació en el año 2003, en el XVIII Encuentro Nacional de Mujeres y en ese entonces, las compañeras que luego fueron las fundadoras de la Campaña decidieron crear un distintivo a favor del derecho al aborto", relata Patricia Bustamante Quintero en diálogo con El Destape. Y recordó: "Cuentan que cuando fueron a encontrar la tela violeta, el color del feminismo, no había. Entonces sobre la marcha definieron que el verde era un color que estaba asociado a la salud y también a la esperanza. Era un símbolo de rebeldía llevar ese pañuelo, cuyo contenido fue variando hasta llegar al logo actual y al triple lema 'Educación Sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar y aborto legal para no morir'".
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Poco a poco pasó de ser un símbolo representativo a una marea verde interminable que presiona y empuja fuertemente, con esas telas triangulares tomadas desde sus puntas, para conseguir el derecho a decidir sobre sus propios cuerpos y ganando espacios y libertades que deberían pertenecerles hace tiempos inmemoriales. "A partir de la lucha de las Madres y las Abuelas, luego del 2x1, cuando surge el pañuelazo como símbolo de resistencia. Por eso, nosotras también lo adoptamos desde la Campaña", expresó la representante del movimiento en relación a su creación e implementación. Siguiendo esa idea de "pañuelazo" se destaca el nuevo gesto de ponerlo al frente, extendido, a modo de barrera contra quienes quieren pisotear los derechos de la mujer.
El pañuelo verde en América Latina
Aquel distintivo que se mantiene presente en cada mochila o muñeca durante los diferentes días del año, no solo marcó un antes y un después en la historia feminista de nuestro país. "El movimiento generado en Latinoamérica y el Caribe tiene relación con una articulación colectiva, de hace años, entre los distintos países de la región en la campaña del 28 de septiembre. Actualmente, también coordina nuestra campaña nacional. Pero esta articulación sumada a la masividad que adquirió la lucha en Argentina, ha potenciado a quienes vienen luchando. El pañuelo verde nos ha unido, no sólo acá, sino en el mundo entero", explicó Bustamente Quintero sobre el tema.
Por eso, frente a la consulta, la abogada feminista no dudó en contar lo que significa que atraviese a las diferentes sociedades: "Siento mucho orgullo de poder ser parte de una construcción colectiva que traspasa las fronteras". Además remarcó que, más allá de la lucha, es el resultado de muchos factores: "La lucha de nuestras pioneras, del compromiso de las docentes que día a día luchan por incorporar el aborto en la ESI, de los profesionales de la salud que garantizan los derechos, de los compañeros y las compañeras que acompañan, activan, militan y ponen el cuerpo en pos de lograr el reconocimiento de un derecho que tiene que ver con algo tan intrínseco a la persona como la dignidad".
Lo que significó el 2018
El presidente de la Nación, Alberto Fernández, envió el proyecto de ley para la legalización de la Interrupción Voluntaria del Embarazo al Congreso buscando que se trate y apruebe, luego de la negativa de hace dos años. Con respecto a los cambios presentados, expresó: "Nosotras vemos que el proyecto que se envió desde el Ejecutivo fue fruto de la lucha de todos estos años. Es muy similar, en algunas partes prácticamente igual, al presentado por la Campaña en mayo de 2019". También reconoció que hay diferencias pero es consciente que, más allá de la elaboración, colectiva, plural, transversal y federal, los legisladores deben "conformar un texto que pueda ser aprobado" y que forma parte de "las reglas del juego".
Bustamente recordó que durante el 2018 "se dio un debate largo e intenso", no solamente en el Congreso sino también en las calles, las aulas y hasta en las mesas familiares. Más allá de lo que significó aquella discusión, cree que fue importante porque "permitió que hoy tengamos una madurez en los argumentos que se pueden observar en relación a una despenalización social y un vuelco al argumento que pasó del, entre comillas, 'aborto sí/aborto no' a discutir cuáles son las políticas públicas que el Estado debe dar para garantizar un derecho que es un tema de salud públicas, derechos humanos y justicia social".
También dejó en claro que al tratarse de una responsabilidad política y una lucha relacionada específicamente con la salud, entendieron la situación de emergencia sanitaria actual a causa de la pandemia por coronavirus y por eso evitaron realizar marchas masivas como podían verse en las calles durante los años anteriores. Por eso, marcó una fuerte diferencia en relación a lo ocurrido en las calles. De todas formas, remarcó: "Nos cuidamos y sin convocar, tomando todos los resguardos, pero nunca bajando la intensidad, sino todo lo contrario".
El futuro de la Ola Verde
Más allá de lo que ocurra con la votación del Senado, donde el poroteo deja mucha dudas en relación a cómo será el resultado final, Bustamante mira hacia el futuro y ya piensa en lo que viene. "Nuestro triple lema contempla la Educación Sexual Integral, la anticoncepción y el Aborto Legal. Para los dos primeros hay leyes hace varios años pero eso no implica que haya un acceso real. Hay un monitoreo constante y una lucha que sigue y seguirá respecto del aborto porque en la implementación se juega la real garantía. Quienes sabemos que la única verdad es la realidad, también sabemos que la lucha por un derecho no termina en el texto de una ley. Hay un camino a transitar para que sea un hecho", sentenció. Lo cierto es que todas las miradas están puestas en el próximo martes y se espera que la Cámara Alta esté a la altura de las circunstancias.