La Policía de Rosario logró recapturar este miércoles a dos de los 16 presos que se fugaron de una comisaría ubicada en barrio José de San Martín, al sur de la ciudad, el pasado domingo. Con esta nueva captura, ahora son cinco los detenidos que volvieron a la cárcel, mientras que todavía quedan 11 prófugos que son buscados por los agentes de seguridad.
Uno de ellos que se escapó de la seccional 16ª fue detenido en una vivienda del barrio La Lagunita, en el extremo oeste de la ciudad. Fuentes policiales indicaron que se recibieron varios llamados telefónicos en los que se indicaba que uno de los presuntos evadidos estaba en una casa, por lo que se realizó un allanamiento que derivó en la captura de Alejandro Zahir García, de 21 años.
Tras constatar que se trataba de uno de los hombres que se escaparon de la comisaría ubicada en Ayacucho al 3300, este fue trasladado a otra seccional, donde quedó a disposición de la Fiscalía de Flagrancia. El otro recapturado fue Jonatan Leonel Zabala, también de 21 años, que se encontraba en una casa del barrio Sorrento y Cullen, en la zona noroeste. Zabala quedó detenido en la seccional 10ª, a disposición de la misma Fiscalía.
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El primer recapturado de los 16 que se escaparon fue Alexis Álvarez, quien fue arrestado horas después de producirse la masiva fuga. Lo encontraron en cercanías de Alem y Garay, gracias al llamado telefónico de un vecino, ya que el evadido le había pedido auxilio luego de fracturarse una pierna al escapar por los techos de la prisión.
Los otros detenidos fueron Luciano Ruiz, que fue apresado en inmediaciones de Esmeralda al 3700, unas 10 cuadras al sudeste de la comisaría, también en la mañana del domingo y Cristian Escobar, arrestado en el atardecer de ese mismo día en inmediaciones de Virasoro y San Nicolás, de barrio San Francisquito.
Rosario: mataron a puñaladas a un jubilado en su departamento
Mientras las autoridades policiales siguen con la intensa búsqueda de los presos que se fugaron, los hechos de violencia en la ciudad no cesan. Un hombre de 75 años fue asesinado en su departamento ubicado en Santa Fe al 1200, en el microcentro de Rosario. El cuerpo fue encontrado por su hija, quien acudió al lugar porque su padre no le respondía el teléfono. La víctima tenía un golpe y siete heridas de arma blanca. Su familiar aseguró que faltaban varios elementos de valor en el lugar.
De acuerdo a las primeras informaciones recolectadas por la fiscal María de los Ángeles Granato del Ministerio Público de la Acusación, Jorge Alberto Gueglio tenía un hematoma en el cráneo y puntazos en el tórax, espalda y rostro. El cadáver fue hallado en la habitación, boca abajo. Fue trasladado al Instituto Médico Legal para la realización de la autopsia.
Los indicios encontrados en la escena hacen presumir a los investigadores policiales que en el lugar también habría estado una mujer, por lo que se profundizarán los análisis de las imágenes de las cámaras de videovigilancia de toda la zona para establecer si se puede captar quién ingresó al edificio en el que vivía la víctima.
Por la constatación que hizo la hija, en el departamento faltaba la billetera y el celular del hombre, además de un juego de llaves del edificio y del auto.
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